Los medios alemanes comenzaron a especular la semana pasada sorbe que la fase de interés negativo de los bonos gubernamentales podría estar llegando a su fin, ya que el optimismo en torno a las vacunas y un repunte económico han llevado a los inversores a vender los bonos.
El rendimiento de los bonos alemanes a 10 años de referencia registra máximos de 12 meses en casi un -0,16%, unos 40 puntos básicos por encima de los -0,6% de principios de año.
La posterior corrección en el mercado de valores llevó el rendimiento a casi el -0.25%, y ahora se está asentando algo por debajo del -0,2%.
Aun así, esto se parece mucho a la luz al final del túnel. El rendimiento ha disminuido constantemente desde 2009, ya que los bonos a 10 años superaron el 4% en ese momento para después registrar mínimos de -0,9% en marzo del año pasado. El rendimiento lleva siendo negativo unos dos años.
Francia, por su parte, emitió 6.800 millones de euros en bonos a 10 años con un rendimiento estimado en el 0,13%, la primera vez que el rendimiento resulta positivo en el momento de la emisión en casi dos años.
Algunos bonos del Gobierno francés habían entrado en territorio positivo la primavera pasada, pero no se registraba un rendimiento de los bonos a 10 años positivo en el momento de la emisión desde junio de 2019.
Mientras los países más grandes de la UE tratan de elevar el rendimiento de sus bonos fuera del territorio negativo, Grecia, que se tambaleaba al borde de la bancarrota hace apenas seis años, está llevando el rendimiento a cero. La emisión de 3.000 millones de euros en bonos a cinco años la semana pasada fue sobresuscrita más de seis veces y con un rendimiento estimado en sólo el 0,2%.
La demanda no es tan difícil de entender a pesar de que las agencias de calificación todavía tienen los bonos soberanos griegos por debajo del grado de inversión y la deuda total del país es proporcionalmente la más elevada de la eurozona con más del 200% del PIB.
Gran parte de esa deuda está en manos de entidades del sector público y es a muy largo plazo. Se espera que el programa de compra de activos de emergencia del Banco Central Europeo compre hasta 12.000 millones de euros de bonos soberanos griegos este año, lo que casualmente es la cantidad que Atenas pretende pedir prestado.
Alemania se dispone emitir un bono verde a 30 años, tal vez hoy mismo [martes] y debería satisfacer una sólida demanda, ya que sus dos primeras emisiones de bonos verdes a 10 años y cinco años resultaron bien. Berlín equipara sus emisiones de bonos verdes con las de bonos convencionales del mismo vencimiento para disipar cualquier preocupación en torno a la liquidez. Otras emisiones de bonos verdes están previstas en septiembre y octubre.
Al otro lado del Atlántico, el rendimiento de los bonos del Tesoro estadounidense a 10 años de referencia se situó por encima del 1,6% el lunes tras caer el viernes después de un informe de empleo mucho menos alentador de lo esperado.
Los inversores están respondiendo a unas previsiones económicas positivas y también les preocupa que la Reserva Federal pueda ser demasiado optimista sobre la inflación.
Las medidas de inflación del mercado han aumentado unos 5 puntos básicos desde finales de la semana pasada, con el umbral de rentabilidad a cinco años en el 2,73% el lunes (máximos de 10 años) y a 10 años por encima del 2,5%. Sin embargo, algunos analistas están empezando a cuestionar la fiabilidad de estas medidas porque utilizan los valores protegidos contra la inflación del Tesoro (TIPS) como base, lo que puede distorsionar la lectura. Temen que puedan aumentar las expectativas de inflación.
Los informes de este miércoles sobre el índice de precios al consumo y del jueves sobre el índice de precios al productor deberían arrojar algo de luz sobre la trayectoria de la inflación.
El Tesoro de Estados Unidos tiene por delante una semana de mucho movimiento en cuanto a emisión de bonos esta semana, con subastas de 58.000 millones de dólares en bonos a tres años el martes, 41.000 millones de dólares en bonos a 10 años el miércoles y 27.000 millones de dólares en bonos a 30 años el jueves. Este alud de oferta también podría impulsar más el rendimiento.