Dos semanas después de que el petróleo pareciera haber sobrevivido a su mayor prueba de fuego en años, Libia ha lanzado una nueva granada política el mercado. Y esto también podría pasar.
Es una historia diferente de metales preciosos, sin embargo, pues el paladio mantiene su racha explosiva y probablemente va camino de los 3.000 dólares por onza en breve.
Libia, que volvió a impulsar los precios del crudo por encima de los 100 dólares por barril, justo un año después de la crisis financiera, cuando la Primavera Árabe de 2010 derrocó al dictador Muammar Gaddafi, está de vuelta a la vanguardia del mercado petrolero.
Pero los traders no parecen estar excesivamente preocupados por la amenaza que plantea Libia, posiblemente porque su atención se centra más bien en los tremendos aumentos de las reservas de combustible de Estados Unidos de las últimas dos semanas.
Amenaza de crisis de suministro
Según se comenta este martes, la producción de petróleo de Libia podría descender pronto hasta 72.000 barriles al día desde un total de 1,2 millones de barriles al día. La crisis se debe a un bloqueo de los envíos de petróleo fuera del estado norteafricano forzado por Khalifa Haftar, un señor de la guerra libio que el Gobierno internacionalmente reconocido de Trípoli dice que podría convertirse en el próximo Gadafi.
La amenaza libia se produce exactamente 14 días después de que Estados Unidos e Irán se apartaran del borde del precipicio de la guerra, dejando a Oriente Próximo, que produce el 40% del petróleo del mundo, en relativa paz.
Sin embargo, la calma que siguió a los lanzamientos de cohetes de Teherán el 6 de enero contra bases aéreas estadounidenses en Irak, tras el asesinato del general iraní Qassem Soleimani, podría ser cuestionable. Ha habido noticias de dos cohetes más aterrizando en las inmediaciones de la embajada de Estados Unidos en Bagdad el lunes aunque, de nuevo, no ha habido que lamentar víctimas.
En el caso de Libia, los analistas estiman que el suministro podía haberse reducido en al menos 800.000 barriles al día desde el sábado, incluidos los 300.000 barriles al día de El Sharara, su mayor yacimiento petrolífero. La National Oil Corp de Libia había declarado ya el estado de fuerza mayor o una exención de las obligaciones contractuales sobre los cargamentos de crudo de El Sharara y del yacimiento petrolífero de El Feel en el suroeste del país.
Libia podría ser un factor de cambio para el petróleo... pero también podría no serlo
La situación de Libia podría ser un factor de cambio para el petróleo, si se permite que persista.
Sin embargo, en el momento de redactar estas líneas, el Brent, de referencia mundial para el crudo, baja 17 centavos, o un 0,3%, hasta 58,41 dólares durante la jornada de negociación de este martes en Asia.
El West Texas Intermediate, el petróleo de referencia estadounidense, se deja 34 centavos, o un 0,5% hasta 64,86 dólares.
"Cada vez que se avecina un gran acontecimiento geopolítico, el mercado se dispara, pero todo el mundo lo ve como una oportunidad de venta", dijo Tony Nunan, gerente de riesgo petrolero de Mitsubishi (T:8058) Corp en Tokio, según Reuters.
Los precios podrían subir cuando los traders de crudo de Nueva York pasen a la acción al reanudar su actividad los mercados estadounidenses tras el fin de semana y la festividad de Martin Luther King.
Más preocupaciones sobre los tremendos aumentos del combustible de Estados Unidos
Sin embargo, hay bastantes probabilidades de que el riesgo de Libia siga viéndose infravalorado en vista del aumento de 15,7 millones de barriles de las reservas de gasolina de Estados Unidos y de 13,8 millones de las reservas de destilados en las últimas dos semanas, frente a las expectativas que apuntaban a 5,8 millones y 5 millones, respectivamente.
Para lastrar aún más los precios del crudo, tenemos el recuento de plataformas petrolíferas activas publicado el viernes por la empresa Baker Hughes, que indicó que los perforadores han añadido 14 plataformas la semana pasada, ascendiendo el total de yacimientos petroleros de Estados Unidos a 673. Un aumento de plataformas, en el sentido más simple, significa una mayor producción de crudo. En las últimas dos semanas, el total de plataformas ha disminuido, ampliando el descenso del año pasado de 208.
"El mercado ha pasado a una línea de base, con una perspectiva ligeramente bajista y una renuencia al precio en riesgo en la forma en que lo había hecho anteriormente", dijo en una nota justo antes del fin de semana.
El oro, de nuevo en más de 1.560 dólares
En el frente de los metales preciosos, el oro está de nuevo por encima del nivel clave de 1.560 dólares, mientras los mercados cuestionan el éxito potencial del acuerdo entre Estados Unidos y China, que mantiene en vigor los aranceles impuestos por ambas naciones entre sí antes del acuerdo.
Los precios del oro también suben este martes como cobertura contra las aciagas previsiones del Fondo Monetario Internacional para 2020 a escala mundial.
Los futuros del oro de Estados Unidos, así como el oro al contado, que sigue las operaciones en directo con lingotes, se sitúan por encima de 1.566 dólares en el momento de redactar estas líneas.
"Tras un notable empuje de posicionamiento, el metal precioso está volviendo a subir", dijo TD Securities en una nota sobre el oro, y añade:
"Las positivas expectativas de crecimiento conllevan un potencial para que la inflación suba, y sin una respuesta proporcional de la Fed, esto se traduciría en unas tasas reales más bajas".
La Reserva Federal recortó los tipos de interés en un cuarto de punto durante tres meses consecutivos en 2019, antes de detener ese ciclo de relajación en diciembre. Los datos económicos de Estados Unidos son en su mayoría optimistas ahora, de modo que los analistas no esperan que el banco central se embarque en una nueva ronda de recortes a menos que resurja la guerra comercial.
El paladio, un mundo aparte
Pero es el paladio el que está acaparando realmente los titulares sobre metales preciosos después de que su precio al contado rompiera el techo de los 2.500 dólares la semana pasada. Eso supone una subida del 30% desde el comienzo del año.
La historia del paladio es la misma que el año pasado: apenas hay oferta nueva del metal catalizador para vender en el mercado, dicen los traders.
Algunos dicen que el desplome del paladio llegará en algún momento, especialmente si el suministro se estabiliza fuera de los principales centros, Sudáfrica y Rusia.
"La dinámica es muy fuerte. Nadie puede decirme que esto va sólo de fundamentales", dijo el analista de Commerzbank (DE:CBKG), Carsten Fritsch, a Bloomberg la semana pasada sobre el repunte del paladio. Fritsch afirma:
"Esto se está convirtiendo ya en una burbuja".
El paladio fue la materia prima de mejor rendimiento en 2019, y su precio al contado ha subido un 55%. El paladio al contado ya ha subido un 30% en lo que va de año, registrando máximos históricos en más de 2.584 dólares este martes.
En Investing.com, nuestro próximo objetivo importante para el paladio son los 3.000 dólares.