Los mercados están a la espera de la ceremonia de Inauguración de Donald Trump como 45º Presidente de Estados Unidos de América, con el juramento y discurso inaugural alrededor de las 11:30 hora local. De acuerdo a algunos reportes, el discurso será corto y se centrará en la necesidad de unir al país y poner los intereses de EE.UU. primero, entre otros temas. Los inversionistas buscarán señales en el tono de dicho discurso y si tomará o no una postura más agresiva a la mostrada hasta el momento y durante la campaña. Las acciones registran ganancias al igual que el dólar, con pérdidas en bonos soberanos a nivel global. En términos generales, estos movimientos son consistentes con la expectativa desde la elección de estímulos fiscales que pudieran impulsar el crecimiento económico y la inflación. En China se publicaron una serie de cifras ayer por la noche. El PIB del 4T16 se ubicó en 6.8% anual, mayor a lo esperado.
La cifra estuvo impulsada por las ventas minoristas que se ubicaron en 10.9% anual, 10pb mayor al trimestre previo, mientras que la producción industrial e inversión fija se desaceleraron moderadamente. En el Reino Unido, las ventas al menudeo cayeron a su mayor ritmo en casi cinco años en diciembre en -2.0% m/m, con el mes anterior también revisado a la baja y que modera parte del reciente optimismo sobre el efecto de una mejoría en el mercado laboral y alude a posibles efectos negativos del aumento en los precios derivado de la caída del GBP.
Entre emergentes el dólar se aprecia sobre todo frente a divisas europeas que caen alrededor de 0.2% en promedio, mientras que algunas asiáticas ganan lideradas por el KRW (+0.6%) y el ZAR es el más débil al caer en la misma magnitud. Entre el G10 las pérdidas son generalizadas con la excepción del SEK en +0.1%, con las demás oscilando entre -0.2% en el JPY hasta -0.7% en el NZD. El EUR/USD baja 0.3% a 1.0635, alcanzando un máximo de 1.0694 en la madrugada y mostrando una resistencia relevante en 1.07 durante toda la semana.
El peso opera 0.1% más débil en 21.99 por dólar, una caída moderada respecto al cierre de ayer, sesión en la que finalizó estable y mostró cierto respiro tras presiones ligeramente por arriba de 22.00 durante la sesión en Europa, aunque con un comportamiento relativamente volátil que sugiere alto nerviosismo sobre la presidencia de Trump. No hay cifras económicas en EE.UU., con discursos de Harker (8:00am) y Williams (12:00pm) del Fed. En México tendremos la tasa de desempleo de diciembre (8:00am) y la encuesta de expectativas de Citibanamex alrededor de las 2:30pm, con particular atención a los estimados de inflación de la 1ª quincena de enero ante el impacto alcista en los precios por el alza en energéticos.
Nos mantenemos sin posiciones en el cambiario por el momento, esperando mejores niveles de entrada para evaluar la posibilidad de nuevas compras del USD/MXN, atentos a la dinámica de mercado en los próximos días. Mantenemos nuestra preferencia por posiciones largas, esperando que el apetito por activos locales se mantenga contenido a pesar de la mejoría en valuación.
En este contexto, seguimos creyendo que el entorno seguirá muy complicado para nuestra divisa en el corto y mediano plazo, por lo que no anticipamos un cambio sostenible en la tendencia de depreciación, afectado sobre todo por la incertidumbre sobre posibles cambios en la relación entre México y EE.UU. No consideramos adecuado iniciar largos en el MXN incluso al nivel actual, permaneciendo defensivos con la expectativa de que los retos locales también sean un factor de riesgo relevante para el peso, con un panorama de bajo crecimiento y presiones alcistas de inflación para este año. Por si fuera poco, otros riesgos relevantes se mantienen en la mira de los inversionistas globales, incluyendo las perspectivas sobre el Fed (mostrando un sesgo más hawkish recientemente), estabilidad financiera en China, negociaciones sobre el Brexit y riesgos geopolíticos en Europa (con este último pudiendo ganar más relevancia hacia mediados de febrero).
Los factores arriba mencionados sugieren un riesgo de caídas adicional y debilidad relativa del MXN, con la sensibilidad al frente político en EE.UU. como la más elevada. En este contexto, pensamos que la probabilidad de fuer es movimientos (en cualquier dirección) y de alta y persistente volatilidad es elevada. Del lado contrario, entre los factores que podrían ser positivos en caso de mantenerse el statu quo, sobresalen: (1) Una mejor valuación relativa a otros emergentes tras las nuevas presiones observadas desde el inicio del año, con el MXN como el segundo peor en este complejo solo detrás del TRY; (2) la posibilidad de nuevas ventas de dólares de manera discrecional por la Comisión de Cambios o incluso nuevas medidas de extenderse fuertemente las pérdidas; y (3) el costo del carry en largos del USD/MXN ha aumentado fuertemente para los especuladores.
En particular, la tasa anualizada a tres meses ha pasado de 2.6% al cierre de 2015 a alrededor de 5.23% actualmente, su mayor nivel en el periodo post-crisis y no observado desde mediados de 2009. En este sentido, esperamos que Banxico mantenga un sesgo hawkish y continúe ampliando el diferencial de tasas frente a EE.UU. este año, lo que tendería a aumentar más este costo implícito en apuestas contra el MXN.