- El ECB mantuvo sin cambios su postura monetaria, como era ampliamente esperado
- La conferencia de Mario Draghi mostró un tono dovish, al igual que en recientes intervenciones
- Los riesgos a la baja sobre el crecimiento y la inflación prevalecen, acompañados de incertidumbre proveniente del entorno externo
- Draghi dijo que las tasas permanecerán en niveles similares o más bajos a los actuales por un periodo extendido de tiempo, incluso después de que el programa de QE termine
- En nuestra opinión, el ECB no anunciará medidas de estímulo adicional en los próximos meses
- No obstante, no podemos descartar hacia delante mayores medidas de estímulo en caso de que el panorama económico no mejore
El ECB mantuvo sin cambios su postura monetaria, como era ampliamente esperado. El Consejo de Gobierno conservó las tasas de interés de referencia sin cambios (tasa refi: 0%; tasa de depósitos: -0.4%; tasa de facilidad marginal de crédito: 0.25%). Mientras tanto, el programa de expansión cuantitativa (QE) tampoco sufrió cambios, luego de que en la reunión previa se diera un aumento de 20mme al monto mensual, que actualmente se ubica en 80mme. Es importante mencionar que hay medidas que se anunciaron en la reunión de marzo que aún no han sido puestas en marcha, tales como: (1) La elegibilidad de bonos corporativos no bancarios con grado de inversión y denominados en euros; y (2) el programa de cuatro TLTROs (TLTRO-II) con vencimiento de cuatro años. Ambas resoluciones comenzarán a aplicarse en junio de este año.
La conferencia de prensa de Draghi mostró un tono dovish, al igual que en recientes intervenciones. El presidente del ECB recalcó que los riesgos a labaja para el crecimiento y la inflación prevalecen, al igual que la incertidumbreque rodea al entorno, por lo que dijo que se mantendrán atentos a la evolución de los sucesos internacionales. Sobre la dinámica de precios, mencionó que espera que la inflación se torne negativa en los próximos meses para luego comenzar a mejorar en la segunda parte del año y hacia adelante. En lo referente al crecimiento, dijo que estima un ritmo de avance de la actividad económica similar al visto en el último trimestre de 2015, destacando que hay optimismo en cuanto a la recuperación de la demanda doméstica, la cual –afirmó- se ha visto beneficiada por las acciones del Banco Central Europeo y la postura monetaria acomodaticia, debido a un mejor dinamismo del crédito, tanto personal como corporativo. Nuevamente destacó que los bajos precios de energéticos siguen sustentando al ingreso disponible de las familias. Como factores en contra del crecimiento hizo referencia a la falta de implementación de reformas estructurales y a las menores perspectivas de crecimiento en mercados emergentes.
Draghi da indicios de mayor estímulo en caso de ser necesario. El presidente del ECB hizo énfasis en la necesidad de política fiscal y de reformas estructurales para lograr una recuperación más robusta. En lo referente a la postura monetaria a futuro, dijo que las tasas permanecerán en niveles similares o más bajos a los actuales por un periodo extendido de tiempo, incluso expresó que las tasas permanecerán bajas después de que el programa de QE termine. Mencionó que no hay evidencia de que las tasas de interés negativas afecten a la utilidad de los bancos y que la experiencia anterior ha sido positiva. No obstante, reconoció que está consciente de las distorsiones y la complejidad que esto genera. Draghi comentó que no han discutido aún la posibilidad de implementar medidas alternas de política monetaria, tales como un programa de helicopter money, aunque sí dijo que su operación presenta dificultades como para considerarse de manera más seria.
En nuestra opinión, no se anunciarán medidas adicionales de estímulo en los próximos meses. El agresivo paquete de estímulo monetario anunciado en la reunión de marzo deberá apoyar un aumento del crédito y mejores condiciones para impulsar el crecimiento económico y disminuir los riesgos a la baja sobre la inflación. De hecho, algunas de las medidas anunciadas en dicha reunión no han comenzado a aplicarse, por lo que deberán esperar a junio y meses subsecuentes para poder evaluar el impacto de las políticas. Por ello, pensamos que no habrá cambios en la postura monetaria del ECB en los próximos meses. No obstante, no podemos descartar hacia delante mayores medidas de estímulo en caso de que el panorama económico no mejore.