Tras el colapso del mercado provocado por el coronavirus en el primer trimestre de 2020, las acciones cerraron junio y el segundo trimestre con un fuerte repunte. Ha sido el mejor trimestre para los inversores en al menos 20 años.
Si bien el repunte fue bienvenido, el futuro no está especialmente claro. Continúa la batalla para controlar la propagación mundial y estadounidense de la pandemia del COVID-19. Por lo tanto, debemos esperar que el mercado siga siendo volátil.
El S&P 500 subió un 1,5% al cierre de este martes. El índice de referencia avanzó un 19,95% durante el trimestre, su mayor ganancia trimestral desde la subida del 20,9% del cuarto trimestre de 1998. En cuanto al mes de junio, el S&P subió un 1,84%.
El Dow Jones de Industriales subió un 17,8% en términos trimestrales. Ha sido el mejor rendimiento del índice de gran capitalización desde el cuarto trimestre de 1998.
Ambos índices, sin embargo, han bajado en términos anuales, dejándose un 4% y un 9,6%, respectivamente.
El NASDAQ Composite, por su parte, ha repuntado un impresionante 30,6% en el trimestre, la mejor actuación del índice de tecnológicas de referencia desde la subida del 48,2% del cuarto trimestre de 1999. Durante el mes de junio, el índice subió un 6%.
La enorme subida del NASDAQ sitúa la subida interanual en el 12,1%.
El índice NASDAQ 100, cargado de grandes acciones tecnológicas, se disparó un 30% trimestral (con un alza del 6,3% en junio). Ha subido ya un 16,3% en lo que va de año.
Una gran razón para la brecha de rendimiento entre el Dow y el S&P y el NASDAQ es que los componentes de los dos primeros índices tratan de representar la economía de manera más general, mientras que más de la mitad de los 12,9 billones de dólares de capitalización de mercado del Nasdaq 100, lo conforma Apple (NASDAQ:NASDAQ:AAPL), Microsoft (NASDAQ:NASDAQ:MSFT), Amazon (NASDAQ:NASDAQ:AMZN) las dos clases de acciones de Alphabet (NASDAQ :NASDAQ:GOOGL) y (NASDAQ:GOOG), Facebook (NASDAQ:NASDAQ:FB), Intel (NASDAQ:NASDAQ:INTC) y Tesla (NASDAQ:NASDAQ:TSLA).
El índice de pequeña capitalización Russell 2000 se disparó un 25% durante el mismo período de tiempo, su mejor subida trimestral desde 1991, alimentada por la recuperación de las acciones biotecnológicas. Aun así, se ha dejado un 13,6% en términos anuales.
Los ganadores de junio
Los ganadores del trimestre se concentraron entre las acciones tecnológicas y biotecnológicas que los inversores consideran que impulsan la economía global en el futuro previsible, incluso esperan que alguna de estas empresas encuentre una cura para el COVID-19.
Además, los inversores fueron aclamados por los esfuerzos de los bancos centrales para respaldar la economía global a través de enormes cantidades de estímulo.
En cuanto al rendimiento individual de las acciones, comenzaremos con Tesla (NASDAQ:TSLA).
Las del fabricante de automóviles eléctricos parecen ser las acciones de referencia para los traders que esperan obtener un beneficio rápido: las acciones subieron un 29,3% en junio, un 106,1% en el segundo trimestre y un 158,1% en lo que va de año.
Apple subió un 14,7% en términos mensuales y un 43,5% trimestral. Microsoft, que ha subido un 11% en junio, ha subido un 29% en términos trimestrales.
Novavax (NASDAQ:NVAX), una de las cientos de empresas que trabajan en una vacuna para el COVID-19, ha cerrado junio con un alza de casi un 154%, y de más de un 500% trimestral.
De gran interés son las acciones de empresas que ayudaron a la población confinada en casa a vivir una vida lo más normal posible bajo las nuevas condiciones de la pandemia.
Zoom Video Communications (NASDAQ:ZM), cuya tecnología de videollamadas permite a las empresas celebrar reuniones de forma remota —y a los viejos compañeros de la universidad reunirse de forma informal— ha subido un 41,3% en junio, un 73,5% en términos trimestrales. Las acciones han subido un 273% en lo que va de año.
No es de extrañar que Amazon —que permite a los clientes comprar online en lugar de aventurarse a salir a las tiendas físicas— también haya subido un 41% en el trimestre y un 13% en junio. La capitalización de mercado de la compañía se disparó un 50%, subiendo de los 916.000 millones de dólares del 31 de diciembre hasta 1,376 billones de dólares el martes.
La compañía de pagos PayPal Holdings (NASDAQ:NASDAQ:PYPL) también ha registrado cifras estelares: ha subido un 12,4% en junio, un 82% trimestral y un 61,1% anual.
Del mismo modo, la tienda online de productos hechos a mano y vintage Etsy (NASDAQ:ETSY) también se ha beneficiado: ha subido un 31% en términos mensuales y un 176% trimestral, a medida que más usuarios permanecen confinados en sus hogares... y recurren a las compras online.
Y no sólo las empresas tecnológicas o biotecnológicas han superado el rendimiento general. Clorox (NYSE:NYSE:CLX), fabricante de lejía y productos de limpieza para el hogar, ha subido gracias a la fuerte demanda de sus marcas. Los minoristas de mejoras para el hogar Home Depot (NYSE:NYSE:HD) y Lowe's (NYSE:NYSE:LOW) subieron un 34% y un 57% trimestral, ya que los propietarios optaron por renovar o mejorar sus entornos mientras permanecen confinados en casa.
... Y los perdedores
En el otro extremo del espectro, las aerolíneas, hoteles y especialmente las líneas de cruceros vieron sus acciones hundirse en el primer trimestre cuando los consumidores dejaron de viajar. Aunque muchas acciones de este sector repuntaron tras registrar mínimos, la mayoría siguen considerablemente deprimidos.
Las acciones del gigante de la industria de cruceros Carnival (NYSE:LON:CCL) han subido un 4% en junio, un 25% trimestral. Sin embargo, las acciones siguen sometidas a una gran presión, dejándose casi un 68% en lo que va de 2020 porque no está claro cuándo comenzarán las líneas de cruceros a funcionar de nuevo. O si podrán atraer clientes.
Los minoristas tradicionales como las cadenas de grandes almacenes Macy's (NYSE:NYSE:M) y Nordstrom (NYSE:NYSE:JWN) también están sufriendo: ambos han tenido que cerrar tiendas y despedir a miles de empleados.
La industria de la energía experimentó un pequeño repunte en junio, ya que los precios del petróleo repuntaron tras los mínimos observados en marzo. Pero los planes de negocios corporativos de los actores del sector para este año habían pronosticado que el crudo posiblemente alcanzaría los 90 dólares. Ni se acercó.
En 39,27 dólares por barril al cierre del martes, el petróleo del West Texas Intermediate subió un 10,6% en términos mensuales y más de un 90% trimestral. Pero el WTI ha caído más de un 35% en lo que va de año. Ha sido un lastre importante para las compañías de petróleo y gas.
Royal Dutch Shell (LON:RDSb) (NYSE:RDSa)) descendió un 2,2% el martes tras rebajar el valor de sus reservas de petróleo y gas en 22.000 millones de dólares. Las acciones cerraron el mes de junio con un alza del 2,3% aunque cayeron un 6,3% durante el trimestre y un 44% en lo que va de año.
El malestar político golpeó tanto a Facebook como a Twitter (NYSE:TWTR) —aunque posiblemente sólo brevemente— pues varios grandes anunciantes, incluyendo Coca-Cola (NYSE:NYSE:KO), Starbucks (NASDAQ:NASDAQ:SBUX), PepsiCo (NASDAQ:NASDAQ:PEP) y Verizon (NYSE:NYSE:VZ) han anunciado la retirada de la publicidad de las plataformas de redes sociales, en un boicot organizado por grupos de derechos civiles que quieren un mejor discurso de control del odio en dichas plataformas.
Facebook descendió un 9,5% el viernes, pero ha reducido sus pérdidas. Las acciones han subido un 5% esta semana.
Twitter, sin embargo, se mantuvo sin pérdidas en términos mensuales. Se dejó un 13% la semana pasada, pero recuperó un 2,5% esta semana. En términos anuales, Facebook aun así acumula ganancias de un 10,6%. Twitter ha bajado un 7%.
Estímulos de la Fed, controles de pandemia y volatilidad
En una economía normal, los inversores en bolsa basan sus decisiones de inversión en el precio de un capital, las previsiones de la compañía de cara al futuro y el entorno económico, incluido el precio del dinero.
Con el rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años en el 0,65%, el dinero es barato. La Reserva Federal ha prometido repetidamente garantizar que el crédito esté disponible y, como dice el antiguo adagio, no se lucha contra la Fed.
El repunte del segundo trimestre reflejó confianza en el banco central estadounidense y el optimismo de que la pandemia estaba bajo control o, en según el presidente Trump, “a punto de desaparecer”.
Ese escenario de color de rosa estalló a finales de junio cuando las tasas de infección se dispararon en estados como Texas, Florida, Arizona y California, donde miles de personas acudían a bares, playas y otros lugares de reunión, ignorando las advertencias de que el virus seguía siendo altamente infeccioso.
Por lo tanto, la volatilidad estalló con la venta masiva el miércoles y el viernes y los repuntes del lunes y el martes.
De hecho, 2020 se perfila como el año más volátil para las acciones desde 2008, 2009 y 2011. Más de 50 jornadas de negociación de lo que va de año hasta el 30 de junio, el S&P 500 ha subido o caído un 1,5% o más, tras 22 días de inactividad y 28 días de inactividad.
Por el contrario, en el transcurso de 2019 ese número fue de sólo 13 días. Durante 2011, el S&P 500 vio 60 días de ganancias o pérdidas del 1,5%. En 2008, un año verdaderamente horrible para las acciones y la economía, el total fue de 98. Este indicador podría ir camino de registrar nuevos máximos históricos en 2020.