Hace alrededor de 7 años, la empresa estadounidense Apple (NASDAQ:AAPL) cambió la manera de escuchar música. Mediante el iPod las personas comenzaron a descargar música de Internet, ya fuera de forma legal o no. Los discos compactos pasaron a la historia y la biblioteca musical se volvió digital.
El iPod permitía a los usuarios guardar miles de canciones, a las cuáles se podía acceder, como es usual en la marca, mediante una interfaz muy amigable. Ahora, el gigante tecnológico busca realizar otra revolución, a pesar de que lo hace en un área donde ya existe competencia.
En los últimos años las descargas de música perdieron fuerza; ya las personas no compran música, sino que la alquilan mediante servicios que reproducen cualquier canción con solo tener una conexión a Internet. El líder en este mercado es la empresa sueca Spotify, la cual cuenta con unos 20 millones de suscriptores que pagan por el servicio y más del doble que usan su versión gratis (la cual cuenta con comerciales).
Varios ya han tratado de competir con Spotify. Recientemente un grupo de artistas, liderados por un famoso cantante estadounidense, Jay Z, se unieron para lanzar una plataforma llamada Tidal, la cual no creó la expectativa deseada. Por lo que parecía no haber un verdadero competidor para Spotify. Algo que cambió la semana pasada cuando Apple anunció su servicio Apple Music.
Si bien esta última está entrando a un mercado donde ya existe un líder, no se puede subestimar el poder de la mayor empresa por capitalización del mercado del mundo. Una que cuenta con un monto de liquidez de 4 veces el Producto Interno Bruto de Costa Rica.
Apple ofrecerá el servicio de forma gratuita durante tres meses y ese lunes comunicó que pagará a los artistas escuchados durante este periodo de prueba; algo que incentivó a varios artistas, que no se encuentran en otros servicios por considerar sus pagos como injustos, a incorporar su música a la plataforma.
¿Funcionará?
Apple puede perder dinero durante los meses en que el servicio es gratis, lo que afectó ligeramente el precio de la acción, la cual no ha podido superar el nivel de US$127. Sin embargo, el objetivo va más allá de convertirse en el nuevo Spotify. La idea de la empresa es tomar una parte importante del mercado, con el fin de atraer a más compradores a sus dispositivos, como lo hizo hace unos años cuando lanzó el iPod.
Millones en el mundo ya cuentan con cuentas en Apple, ya sea para descargar aplicaciones o para el uso de su servicio de almacenaje, iCloud, por lo que será muy sencillo para los usuarios hacer el cambio de otras plataformas a Apple Music.
Una mayor disponibilidad de artistas junto con una interface atractiva será la clave para ganar usuarios de otras plataformas, cuyo foco de negocio es solo ese.