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Por Felipe Iturrieta y Carlos Serrano
COQUIMBO, Chile, 18 sep (Reuters) - Los residentes más afectados en la ciudad portuaria chilena de Coquimbo empezaron el viernes a reconstruir sus casas y negocios arrasados por el fuerte terremoto y posterior tsunami de esta semana, mientras la ayuda gubernamental llegaba poco a poco.
Un sismo de magnitud 8,3 impactó el miércoles por la noche la zona central de Chile, dejando 12 muertos y provocando enormes olas en áreas costeras. Paredes de agua de hasta 4,5 metros golpearon Coquimbo, una zona que el Gobierno declaró en estado de emergencia. ID:nL1N11N0JE
Los residentes pedían al Gobierno que acelerara la ayuda.
"Estamos recién removiendo mugre, los escombros, las autoridades todavía no ven todo el desastre que quedó aquí", dijo María González, cuyo restaurante de pescados y mariscos en el puerto de Coquimbo sufrió graves daños.
"Nosotros pensamos que tienen que ayudarnos en algo para poder arreglar nuestros puestos y seguir la vida que teníamos. Todos quedamos en la calle".
La infraestructura más grande resistió bien el terremoto y sus decenas de réplicas, pero las casas más antiguas de adobe sufrieron los mayores daños. Y casi todo lo que el agua del océano encontró a su paso quedó destruido.
Las autoridades y grupos de ayuda han estado evaluando los daños. Luego de recorrer la zona el jueves, la presidenta Michelle Bachelet prometió alivio para los damnificados.
"Chile tiene recursos suficientes para estas ayudas. Lo que se requiere es priorizar y eso significa graduar algunas cosas", dijo el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, en un comunicado.
AYUDA DEMORADA
Pero ante el retraso de la asistencia gubernamental, un grupo reducido de pobladores afectados por el tsunami en Coquimbo cortó brevemente la ruta que conecta al país de norte a sur. Los vecinos fueron desalojados por la policía.
"Estamos con stock importante de ayuda", dijo Luciano Robles, funcionario de la Oficina de Protección Civil y Emergencia de Municipalidad de Coquimbo, que reconoció que tenían dificultades para distribuirla.
"Entendemos que la gente esté desesperada, no saben qué hacer. La ayuda nos llegó esta mañana y se empezó a entregar desde ya", agregó.
Camiones comenzaron a distribuir agua y alimentos en el municipio, dijo el intendente regional, Claudio Ibáñez.
A pesar de que no habían sufrido daños, muchos comercios en Coquimbo estaban cerrados el viernes por la celebración de las Fiestas Patrias mientras militares patrullaban las calles para prevenir saqueos.
Aunque la ayuda oficial tardaba, pequeños camiones de agrupaciones privadas habían comenzado a arribar a Coquimbo y a la localidad cercana costera de Tongoy cargados con agua, comida enlatada, frazadas y colchonetas.
"El foco nuestro se está basando principalmente en volver a recuperar la economía de los lugares. Hay mucho comerciante afectado", dijo Askaan Wohlt, director de operaciones de Desafío Levantemos Chile, una organización no gubernamental nacida tras el terremoto que sacudió al país andino en febrero del 2010.
"Vamos a reponer infraestructura de almacenes, restaurantes para que la gente pueda volver a trabajar y reactivar la economía del pueblo", agregó Wohlt en Coquimbo.
A la vecina Tongoy habían llegado camiones de la Cruz Roja con provisiones, mientras el Gobierno se preparaba para enviar maquinaria pesada desde la capital Santiago para remover escombros.
Sobre la base de las estimaciones del Servicio Geológico de Estados Unidos, las pérdidas económicas podrían estar entre 100 millones y 1.000 millones de dólares, dijo la agencia de calificación Fitch, que agregó que la cifra real podría ubicarse en el límite superior de ese rango. (Editado en español por Javier López de Lérida y Pablo Garibian)