SÃO PAULO, 30 mayo (Reuters) - Trabajadores petroleros de Brasil planeaban una huelga de 72 horas a partir del miércoles, pese a una orden judicial, en un nuevo golpe al presidente Michel Temer y a una economía que recién se levanta tras una protesta de camioneros de más de una semana.
La huelga planeada por los trabajadores petroleros fue declarada ilegal el martes por la máxima corte laboral de Brasil. La Federación Única de los Petroleros (FUP), el mayor sindicato de los petroleros en Brasil, dijo que no había sido informada de la decisión de la corte y que planeaba realizar la huelga.
La petrolera con presencia estatal Petróleo Brasileiro SA, Petrobras (NYSE:PBR) PETR4.SA , afirmó que una acción de ese tipo no tendrá un gran impacto inmediato en su producción u operaciones en general.
Sin embargo, la huelga planeada aumentaba la probabilidad de que los paros y protestas se propaguen a otros sectores en la medida en que los brasileños manifiestan su frustración con un Gobierno profundamente impopular y una economía que aún no se reactiva.
Sindicatos que representan a los trabajadores petroleros dijeron que exigen la renuncia del presidente ejecutivo de Petrobras, Pedro Parente. También quieren que se reviertan cambios de precios basados en el mercado y otras políticas adoptadas por Petrobras desde que Temer asumió el poder en 2016.
El líder de la FUP, José Maria Rangel, dijo el martes que el Gobierno de Temer y las políticas de Parente estaban entregando a Petrobras a inversores extranjeros, mientras que "los astilleros de Río de Janeiro están cerrados" ante una tasa de desempleo que permanece cerca de máximos históricos.
La huelga de 10 días de los camioneros contra alzas en el precio del diésel vació las carreteras y provocó escasez de alimentos, gasolinas y suministros médicos en grandes ciudades, pese a un alivio significativo el martes por la noche.
Funcionarios advirtieron que tomará días restaurar las líneas de suministro interrumpidas por la huelga que en su momento más álgido mantuvo 1.000 bloqueos carreteros en autopistas clave en Brasil, la economía más grande de América Latina. (Reporte de Brad Brooks; Editado en español por Patricio Abusleme)