Por Hugh Bronstein
BUENOS AIRES, 28 oct (Reuters) - La inesperada demostración de fuerza del candidato opositor Mauricio Macri en la primera vuelta de las elecciones presidenciales del domingo pasado en Argentina podría impulsar la siembra del maíz 2015/16 en el país austral.
Macri desafió todos los pronósticos al forzar con comodidad un balotaje entre su coalición y la del oficialista Daniel Scioli, que obtuvo el primer puesto en los comicios del domingo pero con una diferencia mínima sobre el actual alcalde de la ciudad de Buenos Aires, quien es el favorito de los mercados.
Macri dijo que si es electo presidente eliminará los límites a las exportaciones que rigen sobre el maíz y el trigo, como también los impuestos a sus embarques. En cambio, Scioli se ha mostrado más vago al expresar solamente que revisaría las políticas fiscales de la presidenta Cristina Fernández.
Según los productores agrícolas, las medidas prometidas por Macri serían un gran incentivo para incrementar la superficie sembrada con maíz, cuya área se ha reducido en los últimos años debido a una caída de la rentabilidad del cultivo.
En los campos de Argentina los lotes de trigo 2015/16 ya han sido sembrados, mientras que la implantación de la soja, el principal cultivo del país, está por comenzar.
En cambio, los productores ya sembraron parte del maíz y ahora están aguardando el resultado electoral para definir el área que será ocupada con el cereal tardío, cuya ventana de implantación se extiende hasta enero.
El próximo presidente de Argentina, que asumirá el cargo en diciembre, se definirá en un balotaje el 22 de noviembre.
La Bolsa de Cereales de Buenos Aires estimó la superficie que será utilizada con maíz de uso comercial 2015/16 en 2,7 millones de toneladas, por debajo de los 3,4 millones del ciclo previo. urn:newsml:reuters.com:*:nL1N12Q0B4 Pero esa estimación fue elaborada antes del sorprendente resultado de los comicios del domingo.
"Si las señales políticas son correctas, podríamos registrar una superficie de maíz igual a la que se sembró el año pasado", dijo a Reuters Martín Fraguío, director ejecutivo de la cámara sectorial Maizar.
Según datos oficiales, en lo que va del año, Argentina -el cuarto proveedor global de maíz- exportó 12,9 millones de toneladas del cereal.
"El mercado nos está mostrando que (los límites a las exportaciones) no nos molestarán en la próxima cosecha", dijo Santiago del Solar, un productor agrícola de la provincia de Buenos Aires, el principal distrito agrícola del país.
Según del Solar, el precio a futuro del maíz para abril del 2016 subió a entre 140 y 143 dólares por tonelada en Argentina, desde los 130 dólares de hace un par de semanas.
Sin embargo, del Solar sostuvo que de todos modos el área que totalizará el maíz en la campaña actual se verá limitada debido a que algunos productores ya compraron insumos y prepararon sus campos para sembrar soja en lugar del cereal.
¿GRANDES GANANCIAS?
Si se eliminaran los límites a la exportación, los niveles de ganancias de los agricultores de maíz podrían multiplicarse en el ciclo 2015/16, señaló la consultora Agritrend.
La rentabilidad de un productor de maíz con tierras propias podría crecer a 672 dólares por hectárea -desde los 350 dólares actuales-, mientras que aquellos que alquilan sus campos podrían duplicar su nivel de ganancia a 548 dólares por hectárea, según Agritrend.
Un triunfo de Macri también podría alentar un crecimiento del área que se sembrará con trigo en la próxima campaña. En Argentina, cerca del 60 por ciento de las tierras rurales son alquiladas.
"Esperamos que desde el primer día Macri elimine los impuestos a las exportaciones de maíz y trigo. Eso es un gran incentivo para ambos cultivos", dijo Fraguío. (Reporte de Hugh Bronstein; Traducido al español por Maximilian Heath; Editado por Javier López de Lérida)