Investing.com - El Banco de México dio una mala noticia para el próximo gobierno de Andrés Manuel López Obrador al recortar su pronóstico de crecimiento para el año 2019.
Durante la presentación de su Informe Trimestral, el banco central recortó su previsión del informe anterior del rango de 1.8% a 2.8% a un rango de 1.7% a 2.7%.
Al respecto, el gobernador del Banco de México, Alejandro Díaz de León, expresó que esta revisión a la baja del PIB se debe a distintos factores, entre los cuales destacó el próximo presupuesto del gobierno federal.
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Respecto a la inflación, Banxico estimó que en los próximos meses el indicador quede alrededor del 3%.
“Se prevé que la inflación general se aproxime hacia el objetivo de 3% a lo largo de 2019, ubicándose durante el primer Semestre del 2020 alrededor de dicho objetivo”.
Entre los riesgos para la inflación que destacó el Informe Trimestral están que la cotización del peso continúe viéndose presionada, que persistan presiones en los precios de los energéticos o incrementos en productos agropecuarios y un escalamiento de medidas proteccionistas.
También el Banco de México destacó factores que pueden afectar la economía mexicana, como que las decisiones de política pública generen preocupación en los mercados y una pérdida de la confianza en México como destino de inversión y que se acentúen los problemas de inseguridad pública, de corrupción, de impunidad y de falta de estado de derecho.
De igual forma, que se retrase la ratificación e implementación del acuerdo comercial alcanzado con EU y Canadá.
“Que se observen episodios de volatilidad en los mercados financieros internacionales. Que la ejecución del gasto público se vea retrasada ante los retos de la implementación de la agenda de política pública asociados al comienzo de una nueva administración”.
En sus consideraciones finales, Banxico resaltó que es necesario preservar y robustecer un marco macroeconómico sólido que anteponga la disciplina fiscal y la estabilidad de precios, reforzando la transparencia y rendición de cuentas de las políticas públicas.
“Se deben propiciar condiciones de mayor competencia en los diversos sectores de actividad y generar los incentivos que privilegien la creación de valor y no la búsqueda de rentas. Además, es necesario invertir en la infraestructura que permita al país fortalecer tanto su mercado interno, como su vocación exportadora”.
Adicionalmente, añadió, deben adoptarse las políticas adecuadas en ámbitos distintos al económico, de manera que se combatan la inseguridad y la corrupción, que se garantice el respeto a la propiedad privada, que se fomente un ambiente de certidumbre para la inversión y que prevalezca la certeza jurídica.