El Banco Central de Egipto informó el lunes de que el déficit por cuenta corriente del país aumentó significativamente, alcanzando los 17.100 millones de dólares durante los nueve primeros meses del año fiscal 2023/24. Esto supone un aumento sustancial respecto al déficit de 5.300 millones de dólares registrado en el mismo periodo del año fiscal anterior. Esto supone un aumento sustancial con respecto al déficit de 5.300 millones de dólares registrado en el periodo comparable del año fiscal anterior.
El fuerte descenso de las exportaciones de petróleo, que cayeron en 7.200 millones de dólares hasta los 4.600 millones, fue un factor clave que contribuyó al aumento del déficit. Al mismo tiempo, Egipto experimentó un aumento de las importaciones de productos petrolíferos en 1.500 millones de dólares y de las importaciones de gas natural en 268,2 millones de dólares de julio a marzo. Estos cambios se producen en un momento en que Egipto se enfrenta a la escasez de electricidad, agravada por una ola de calor que ha aumentado la demanda de refrigeración.
Otro factor que contribuyó al déficit fue la disminución de los ingresos por el Canal de Suez, que cayeron a 5.800 millones de dólares en el mismo periodo, frente a los 6.200 millones del año anterior. El banco central destacó que el descenso más significativo se produjo entre enero y marzo de 2024, cuando los ingresos cayeron un 57,2%, hasta 959,3 millones de dólares, frente a los 2.200 millones de los meses correspondientes del año anterior.
El banco central atribuyó este descenso principalmente a las interrupciones del tráfico marítimo en el Mar Rojo, que llevaron a varias compañías navieras comerciales a modificar sus rutas. Estas interrupciones estaban relacionadas con los ataques de los Houthis, apoyados por Irán, en el Mar Rojo, que han atacado buques en actos de solidaridad con los palestinos durante el conflicto entre Israel y Hamás en Gaza.
A pesar del creciente déficit por cuenta corriente, Egipto experimentó un aumento positivo de las inversiones extranjeras directas netas, que se triplicaron hasta los 23.700 millones de dólares, frente a los 7.900 millones del mismo periodo.
Sin embargo, las remesas de los trabajadores, una importante fuente de divisas para Egipto, disminuyeron de 17.500 millones a 14.500 millones. En el lado positivo, el sector turístico registró un ligero aumento de sus ingresos, 10.900 millones de dólares, frente a los 10.300 millones del año anterior.
El año fiscal en Egipto concluye el 30 de junio, y estas cifras representan una instantánea crítica de los retos económicos del país y las áreas de crecimiento a medida que avanza el año fiscal.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.