Por Laura Sánchez
Investing.com - Semana de infarto para los mercados europeos, con la atención centrada en los bancos centrales y en sus reuniones de decisión de tipos. La Reserva Federal estadounidense (Fed) se reúne el miércoles, y el jueves será el turno del Banco de Inglaterra (BoE) y el Banco de Japón (BoJ).
Pero, sin duda, toda la atención está fijada en la Fed, que se está viendo arrinconada por los mercados, además de por el propio presidente estadounidense, Donald Trump, para bajar tipos.
El mercado mira con lupa cada nuevo dato macro que se publica en Estados Unidos, y su relación directa con el pulso económico del país.
La disyuntiva de Jerome Powell, presidente de la Fed, en la reunión del miércoles, es complicada. “La Fed tiene que tomar una decisión: respaldar los actuales niveles de precio y mantener la calma, o sugerir que se fue demasiado rápido y dar a los activos de riesgo una gran sacudida”, explican en Renta Markets.
Según estos expertos, “las expectativas son mucho más bajas para un recorte de los tipos de interés esta semana. El consenso espera 3 cortes de 25 puntos básicos cada uno en las reuniones de julio, septiembre y diciembre”, si bien hacen hincapié en que “la Fed redujo el pronóstico de crecimiento para 2019 en 40 puntos básicos, hasta el 1,9%. Así que habrá que estar atentos para ver que ocurre el miércoles”.
“Se espera que el miércoles el FOMC y, posteriormente en rueda de prensa su presidente, Jerome Powell, dejen claro sus intenciones de actuar para impedir que la desaceleración de la economía del país pueda desembocar en una nueva recesión, posibilidad que los mercados de bonos parecen estar descontando”, apuntan en Link Securities.
Estos analistas explican que “el reciente rebote experimentado por las bolsas occidentales tras la corrección sufrida por estos mercados durante el pasado mes de mayo ha sido consecuencia, principalmente, de las expectativas de los inversores en relación al compromiso de los bancos centrales de seguir apoyando el crecimiento económico con políticas acomodaticias. Este punto es el riesgo que para el comportamiento a corto plazo de las bolsas identificamos en estos momentos: que la Fed defraude las mencionadas expectativas de los inversores y no dé por seguras las bajadas de tipos que esperan los mercados. En este hipotético caso, volverían las ventas a las bolsas, y lo harían con intensidad”.
“Entendemos que los miembros de la Fed, la mayoría de los cuales han venido apoyando en sus últimas intervenciones públicas la posibilidad de volver a actuar para evitar una mayor ralentización económica -la moderada inflación juega a favor de esta estrategia-, abogarán en la reunión del FOMC por no defraudar a los mercados financieros, en un momento en el que una severa corrección de los mismos podría tener un impacto muy negativo en la economía de EE.UU.”, añaden en Link Securities.
A todo esto se suma que los mercados no esperan una solución a corto plazo en la guerra comercial entre Estados Unidos y China, “conflicto que parece está comenzando a pasar factura a ambas economías”, concluyen en Link Securities.