Por Scott Kanowsky
Investing.com -- La presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, se comprometió a trabajar para frenar la creciente inflación en una conferencia de prensa muy seguida en Ámsterdam el jueves.
Los comentarios de Lagarde se producen después de que el BCE anunciara sus planes de detener su programa de compra masiva de bonos y aumentar las tasas de interés en 25 puntos base en julio, con el fin de reducir los precios hasta el objetivo del 2% del banco central.
El BCE también se comprometió a una nueva subida de tasas en su reunión de septiembre. Lagarde no especificó la magnitud de esa medida, sino que dijo que ese aumento dependerá de los cambios en las perspectivas de inflación del BCE.
"Si las perspectivas de inflación a medio plazo persisten o se deterioran, será apropiado un incremento mayor en nuestra reunión de septiembre", dijo Lagarde. "Así que [...] si está en el 2.1% en 2024 o más allá, el ajuste del incremento será mayor, la respuesta es sí".
Más allá de septiembre, el banco central añadió que prevé una "senda gradual pero sostenida" de subidas de tasas, en función de los datos que vayan llegando.
El BCE también elevó su previsión de inflación en la zona del euro en 2022 hasta el 6.8% desde el 5.1%, con la previsión de que los precios de la energía se mantengan altos durante más tiempo debido al conflicto en Ucrania. La inflación se reducirá al 3.5% en 2023 y al 2.1% en 2024. Las previsiones de crecimiento anual del PIB real también se redujeron al 2.8% para 2022 y al 2.1% en los dos años siguientes.
El EUR/USD subió inicialmente tras el anuncio del BCE, pero cayó después del discurso de Lagarde, cotizando a 1.0691 dólares a las 09:28 EST (1327 GMT). Mientras tanto, los rendimientos de los bonos de referencia a 10 años de Italia y Alemania se dispararon, tocando sus niveles más altos en ocho años.