Investing.com – El peso mexicano inicia con fuerza frente al dólar estadounidense en la jornada de este 19 de septiembre, una fecha especial para México, pues es el día en que ocurrieron dos importantes terremotos que causaron grandes estragos en diferentes ciudades de la República, dejando tatuadas importantes cicatrices en la piel de los habitantes de México: el primero de ellos ocurrió el 19 de septiembre del 1985 y el segundo que ocurrió el mismo día del 2017.
La jornada de hoy también es especial al ser antesala al anuncio de la decisión de política monetaria de la Reserva Federal de los Estados Unidos, una decisión local que tiene un impacto internacional, pero principalmente sobre México por su impacto en el diferencial de tasas de interés entre ambos vecinos, y en el atractivo de los activos financieros.
A las 05:00 de la madrugada – tiempo del centro de México- el peso mexicano cotizaba en 17.09 unidades por dólar, lo que representa una apreciación del 0.20% respecto al dólar estadounidense, de acuerdo con datos en tiempo real disponibles en Investing.com.
Durante la sesión anterior, la divisa mexicana operó con altibajos, cerrando con una depreciación del 0.24% en 17.11 pesos por dólar, y registrando un máximo de 17.18 y un mínimo de 17.0311.
En las horas de negociación europea, el Índice dólar ha operado con cautela alrededor del nivel de 104.617, y con pocos cambios respecto a la sesión anterior, y con la atención puesta en el evento estrella de la semana: la decisión de política monetaria de la Reserva Federal, que ocurrirá mañana miércoles, 20 de septiembre, y media hora después, se llevará a cabo la acostumbrada conferencia de prensa del presidente de la Fed, Jerome Powell.
Máxima atención a la Fed
Los mercados esperan que la Fed no aumente las tasas de interés en la decisión de mañana, de manera que permanecerían en el actual rango que va desde el mínimo 5.25% al máximo 5.50%.
El barómetro de la Fed de Investing.com indica que las apuestas están en 98% sesgadas hacia este escenario.
Pero sí se espera que, tanto el tono del comunicado, como el discurso de Powell, muestra señales hawkish, debido a que la inflación aun no terminar de aterrizar en el 2% y a la fortaleza del mercado laboral.
Uno de los factores que incide en la inflación es el aumento a nivel del global del petróleo.
“El WTI llegó a alcanzar un máximo de 92.33 dólares por barril en la sesión (de ayer), no visto desde el 7 de noviembre del 2022”, explica Gabriela Siller, directora de Análisis Económico y Financiero de Banco Base.
Proyecciones económicas a la vista
Mañana también se conocerán las nuevas proyecciones económicas que los miembros del FOMC tienen para la Fed, incluyendo la actualización del diagrama de puntos, en donde podremos ver si se ha llegado a la tasa de interés terminal o, si por el contrario, hay otro ajuste previsto en las dos decisiones que quedan del 2023, noviembre y diciembre.
“Aunque los mercados no esperan cambios en la tasa de fondeo, existe cierta incertidumbre por las nuevas proyecciones económicas-financieras y el discurso de Jerome Powell, presidente del organismo central”, comenta Jorge Gordillo Arias, director de Análisis Económico, Bursátil y Financiero de CIBanco en un reporte de cierre de mercados de ayer.
“En particular, son las estimaciones de la tasa de interés (dot-plot) las que concentrarán las miradas. En primer lugar, porque estas proyecciones resolverán las dudas respecto el nivel terminal de la tasa de interés es EUA, y en segundo, porque aportarán indicios sobre un posible recorte de tasas en 2024”, indicó.
¿Para cuándo los recortes?
Sobre este punto, Francesco Casarella, analista financiero de Investing.com comenta que, estadísticamente, en el pasado, desde el fin de las subidas de tasas hasta el primer recorte, suele existir una pausa media de cinco meses.
“Esto significa, que si la inflación sigue mostrando signos de desaceleración, y por lo tanto la Fed ya no se ve obligada a subir, podríamos empezar a ver cierta relajación a partir del primer trimestre de 2024, siempre utilizando el condicional, por supuesto”, explicó en un análisis.
“Mientras tanto, la economía estadounidense, y en particular el mercado laboral, siguen mostrándose sólidos y robustos, otro factor que da a la Fed más margen de maniobra que a sus homólogos europeos, donde los datos económicos empiezan a mostrar signos de angustia”.
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