Por Alister Doyle y Valerie Volcovici
PARÍS, 12 dic (Reuters) - La principal negociadora de Venezuela para temas climáticos planea visitar la tumba del presidente socialista Hugo Chávez para honrarlo como el arquitecto ignorado del acuerdo alcanzado el sábado en París para aminorar el calentamiento global.
"Él tenía razón. Estamos aquí por él", dijo a Reuters Claudia Salerno, una de las negociadoras más combativas y con más experiencia en las conversaciones de la ONU, asegurando que la oposición a Chávez que ayudó a bloquear una cumbre en el 2009 sobre calentamiento global en Copenhague fue un estímulo para que las naciones volvieran a negociar un mejor acuerdo este año.
Chávez, que murió de cáncer en el 2013, estaba entre un pequeño grupo de líderes -la mayoría latinoamericanos de izquierda- que aseguraba que el acuerdo climático en Copenhague no le exigía suficientes recortes de gases invernadero a los países desarrollados.
"Muy probablemente visitará su tumba", dijo, agregando que le llevará el texto del acuerdo de París, que obliga a los países ricos a hacer más para ayudar a las naciones más pobres a adaptarse más a las olas de calor, sequías, inundaciones y las crecientes mareas.
El perfil de Twitter (N:TWTR) de Salerno tiene una foto de Chávez de fondo y ella suele usar un broche de Chávez en su saco.
El ministro de Relaciones Exteriores francés, Laurent Fabius, le dio a Salerno, embajadora de Venezuela ante la Unión Europea, la responsabilidad de escribir el preámbulo del acuerdo de París. Incluye menciones que la igualdad de género, los derechos humanos, los derechos de los indígenas y la necesidad de proteger a la Madre Tierra.
Salerno inquietó a muchos en Alemania en octubre al ser la más crítica en las charlas preparatorias para París, asegurando: "Ya he visto esta película (...) espero que no vaya a ser una muy muy mala segunda Copenhague".
Más temprano esta semana, Salerno ya estaba más optimista sobre el resultado final del acuerdo. "Por primera vez tenemos la sensación de que finalmente nuestra paranoia ha desaparecido", sostuvo.
La funcionaria aseguró que su hija, de siete años, la ha estado llamando todos los días. "Mis hijos me están preguntando todos los días si llegamos a un acuerdo. Eso es aún más presión que la que tengo de mi propio gobierno", dijo. (Editado en español por Pablo Garibian)