22 nov (Reuters) - La desaparición de un submarino de la armada argentina con 44 tripulantes a bordo mostró los peligros que enfrenta la navegación bajo el agua. Si bien los desastres no son usuales, estos son algunos de los peores de las últimas décadas.
Catástrofe del Kursk
El submarino ruso de misiles guiados K-141 Kursk, se hundió el 12 de agosto de 2000 en el mar de Barents después de dos explosiones en su proa. Los 118 hombres a bordo del submarino de propulsión nuclear murieron. Después de recuperar los cuerpos del submarino, los oficiales determinaron que 23 miembros de la tripulación, incluido el comandante de Kursk, habían sobrevivido al accidente inicial antes de asfixiarse.
Hundimiento del K-8
Un incendio a bordo del submarino de ataque soviético K-8, el 8 de abril de 1970, inutilizó el buque de propulsión nuclear en el Golfo de Vizcaya, obligando a la tripulación a abandonarlo. Los marineros abordaron el submarino nuevamente después de que llegó un barco de rescate. Pero el submarino se hundió mientras era remolcado con 52 tripulantes a bordo.
El Scorpion desaparece
En mayo de 1968, el submarino de ataque Scorpion de la Marina de Estados Unidos desapareció en el Océano Atlántico con 99 hombres a bordo. Los restos se encontraron en octubre a unos 644 kilómetros al suroeste de las islas Azores, a más de 3.050 metros de profundidad. Ha habido varias teorías para explicar el desastre: la liberación accidental de un torpedo que describió un círculo y golpeó al Scorpion, una explosión de la enorme batería del submarino e incluso una colisión con una nave soviética.
El hundimiento de K-129
El K-129, un submarino de misiles balísticos soviético de propulsión nuclear, se hundió el 8 de marzo de 1968 en el Océano Pacífico con 98 tripulantes a bordo. La armada soviética no logró encontrar el buque. Un submarino de la Marina de Estados Unidos lo encontró al noroeste de la isla hawaiana de Oahu a una profundidad de unos 4.900 metros. Un barco de perforación en alta mar, el Hughes Glomar Explorer, pudo salvar parte del submarino en una operación secreta. Los restos de seis tripulantes soviéticos encontrados en el submarino fueron sepultados en el mar.
La implosión del Thresher
El submarino de ataque nuclear Thresher de la Armada de Estados Unidos se perdió el 10 de abril de 1963 con 129 hombres a bordo. El submarino se rompió a 2.560 metros de profundidad durante pruebas de inmersión al sureste de Cape Cod en Massachusetts. Según las revisiones militares estadounidenses del accidente, la explicación más probable es que una unión de tuberías de un sistema de agua de mar de la sala de máquinas cedió, lo que provocó un cortocircuito y que el reactor del buque se apagara dejándolo sin energía suficiente para evitar el hundimiento.
K-19: accidente nuclear
El K-19, uno de los dos primeros submarinos de misiles balísticos nucleares soviéticos, había estado plagado de averías y accidentes antes de su lanzamiento. Durante su primer viaje, el 4 de julio de 1961, el submarino sufrió una pérdida total de refrigerante en su reactor frente a la costa sureste de Groenlandia. La tripulación de ingeniería del buque sacrificó sus vidas para instalar un sistema de refrigeración de emergencia. Veintidós de los 139 hombres a bordo murieron por exposición a la radiación. Los 117 restantes sufrieron diversos grados de enfermedad por radiación. El accidente se recreó en la película de 2002 "K-19: The Widowmaker". (Compilado de Jonathan Oatis; Editado en español por Javier López de Lérida)