por Ricardo Garduño Pacheco
Infosel, marzo. 1.- Un juez concedió a la Confederación Nacional de Cámaras Industriales (Concamin) una suspensión provisional que frenará el proceso necesario para aplicar el nuevo y controvertido etiquetado para alimentos y bebidas.
El freno al proceso, otorgado el 26 de febrero, permitirá al Juzgado Séptimo de Distrito en Materia Administrativa analizar las modificaciones a la Norma Oficial Mexicana [NOM-051], un cambio que de acuerdo con sus promotores permitirá a las personas determinar de una manera más sencilla si los alimentos que consumen son saludables o no, opinión que no comparten sus detractores, quienes consideran no se tomó en cuenta de forma rigurosa la evidencia científica.
"Esto muestra que hay dudas razonables sobre la transparencia y legalidad del proceso de discusión y aprobación de la norma tal y como desde el pasado 24 de enero, el sector privado mexicano lo manifestó a la opinión pública", escribieron en un comunicado conjunto Concamin y el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), el máximo órgano de representación de la iniciativa privada y al cual está afiliado el órgano al cual están asociadas distintas cámaras industriales.
Los cambios a los etiquetados frontales de alimentos y bebidas no alcohólicas envasados fueron impulsados por algunas asociaciones activistas --como Poder del Consumidor-- y aprobados por legisladores. Dichas modificaciones implican agregar octágonos negros que adviertan si un producto es alto, o no, en sodio, azúcares, grasas y calorías.
Dicho etiquetado incluso fue avalado por el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
Para los industriales los cambios en el etiquetado de los productos, además de no tomar en cuenta la evidencia científica, también pasan por alto estudios y tratados de comercio internacionales.
"De ahí que el sector empresarial se vio obligado a recurrir a las instancias legales para hacer valer el derecho a un proceso incluyente, transparente y con rigor científico", agregaron CCE y Concamin.
Infosel, marzo. 1.- Un juez concedió a la Confederación Nacional de Cámaras Industriales (Concamin) una suspensión provisional que frenará el proceso necesario para aplicar el nuevo y controvertido etiquetado para alimentos y bebidas.
El freno al proceso, otorgado el 26 de febrero, permitirá al Juzgado Séptimo de Distrito en Materia Administrativa analizar las modificaciones a la Norma Oficial Mexicana [NOM-051], un cambio que de acuerdo con sus promotores permitirá a las personas determinar de una manera más sencilla si los alimentos que consumen son saludables o no, opinión que no comparten sus detractores, quienes consideran no se tomó en cuenta de forma rigurosa la evidencia científica.
"Esto muestra que hay dudas razonables sobre la transparencia y legalidad del proceso de discusión y aprobación de la norma tal y como desde el pasado 24 de enero, el sector privado mexicano lo manifestó a la opinión pública", escribieron en un comunicado conjunto Concamin y el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), el máximo órgano de representación de la iniciativa privada y al cual está afiliado el órgano al cual están asociadas distintas cámaras industriales.
Los cambios a los etiquetados frontales de alimentos y bebidas no alcohólicas envasados fueron impulsados por algunas asociaciones activistas --como Poder del Consumidor-- y aprobados por legisladores. Dichas modificaciones implican agregar octágonos negros que adviertan si un producto es alto, o no, en sodio, azúcares, grasas y calorías.
Dicho etiquetado incluso fue avalado por el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
Para los industriales los cambios en el etiquetado de los productos, además de no tomar en cuenta la evidencia científica, también pasan por alto estudios y tratados de comercio internacionales.
"De ahí que el sector empresarial se vio obligado a recurrir a las instancias legales para hacer valer el derecho a un proceso incluyente, transparente y con rigor científico", agregaron CCE y Concamin.