El rendimiento de referencia del Tesoro a 10 años ha subido hoy hasta el 4%, tras los optimistas datos del mercado laboral estadounidense publicados el viernes, que mostraron la mayor creación de empleo en seis meses para el mes de septiembre. Estos datos han provocado una reducción de las expectativas de un recorte de tipos por parte de la Reserva Federal. La semana pasada, la probabilidad de un recorte de tipos de 50 puntos básicos en el próximo anuncio de política monetaria de la Reserva Federal del 7 de noviembre superaba el 50%, pero desde entonces se ha reducido, lo que ha provocado un aumento de los rendimientos de la deuda pública.
El rendimiento del Tesoro a 10 años subió al 4%, un nivel no visto en dos meses, lo que refleja un aumento de 2 puntos básicos en el día, que se suman a la subida de 13 puntos básicos del viernes. Las acciones europeas, que subieron inicialmente tras los datos de empleo, experimentaron una ligera caída del 0,2%, con ganancias en sectores como el bancario, que se beneficia de unos tipos más altos, mientras que las acciones inmobiliarias, que no suelen favorecer unos tipos más altos, experimentaron descensos.
Los futuros del S&P 500 estadounidense cayeron un 0,3%, a pesar de que el índice había ganado un 0,9% el viernes y se acercaba a máximos históricos. Samy Chaar, economista jefe de Lombard Odier, comentó la situación económica actual, señalando la ausencia de recesión e inflación y destacando el actual ciclo de recortes de tipos por parte de los bancos centrales, así como la contribución de China al estímulo económico.
En noticias geopolíticas, las tensiones se intensificaron en Oriente Medio con el lanzamiento de cohetes de Hezbolá contra Haifa, la tercera ciudad más grande de Israel, a primera hora de hoy. Este ataque se produce en el primer aniversario de la guerra de Gaza y en medio de una posible ampliación de las operaciones terrestres de Israel en el sur del Líbano.
En el mercado de materias primas, los futuros del crudo Brent subían un 1,3%, a 79,08 dólares el barril, cerca del máximo de un mes alcanzado el viernes y tras la mayor subida semanal en más de un año. Las acciones asiáticas experimentaron una subida, con los mercados chinos en tierra cerrados por festivo hasta el martes, lo que deja a los inversores a la expectativa de si persistirá el impulso de las acciones debido a los estímulos económicos previstos.
Los fuertes rendimientos estadounidenses han impulsado al dólar, especialmente frente al yen japonés, que alcanzó un máximo de 149,10 yenes por primera vez desde el 16 de agosto. Sin embargo, tras los comentarios del principal diplomático japonés en materia de divisas, Atsushi Mimura, sobre una estrecha vigilancia de los movimientos de divisas y las operaciones especulativas, las ganancias del dólar se moderaron hasta 148,3 yenes.
El índice del dólar, que compara el dólar estadounidense con una cesta de las principales divisas, se situó en 102,5, justo por debajo del máximo de siete semanas alcanzado el viernes. Los analistas de ING han sugerido que puede que no haya un catalizador claro que invierta las recientes ganancias del dólar en las próximas tres semanas, lo que indica una posible consolidación.
En Europa, los responsables de la política monetaria del BCE muestran una mayor inclinación a recortar los tipos este mes, una medida ya anticipada por los precios del mercado. Francois Villeroy de Galhau, responsable del Banco Central francés, ha declarado hoy que es bastante probable que se produzca un recorte de los tipos en octubre.
Mientras tanto, los bonos de la zona euro se vieron más influidos por los acontecimientos en EE.UU. que por factores locales, y el rendimiento del bono alemán a 10 años aumentó 4 puntos básicos, hasta el 2,54%, su nivel más alto en un mes. El precio del oro se mantuvo estable en 2.650 dólares la onza.
Reuters colaboró en la elaboración de este artículo.
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