Un cohete Falcon 9 de SpaceX experimentó el jueves por la noche un raro fallo en el motor de la segunda etapa durante una misión del satélite Starlink, lo que podría poner en peligro el despliegue de 20 satélites. El incidente se produjo tras un exitoso despegue desde la base espacial de Vandenberg a las 22.35 hora local.
El motor llegó al espacio, pero no volvió a encenderse para un segundo encendido, necesario para colocar los satélites en su órbita designada. Como resultado, los satélites fueron liberados en una órbita inferior a la prevista. El consejero delegado de SpaceX, Elon Musk, expresó su preocupación por la posibilidad de que los satélites no pudieran ajustar su trayectoria para alcanzar la órbita correcta y fueran arrastrados de nuevo a la atmósfera terrestre.
Se trata del primer fallo importante de un cohete Falcon 9 en más de siete años, lo que pone de relieve la rareza de este tipo de sucesos en el lanzador de SpaceX. La empresa ha estado utilizando el Falcon 9 para poner en órbita regularmente lotes de satélites Starlink con el fin de construir su amplia constelación de Internet de banda ancha. La posible pérdida de estos satélites podría suponer un revés para el despliegue en curso de la red Starlink.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.