por Fernanda Celis
Infosel, enero. 11.- Restauranteros en la Ciudad de México saldrán a las calles este lunes para exigir al gobierno capitalino ser considerados esenciales y permitir la reapertura de sus negocios físicos, que mantienen sus operaciones solo con servicio para llevar para evitar la propagación del coronavirus covid-19.
Diversos miembros de la industria restaurantera explicaron en un comunicado que a pesar de que el sector es parte esencial de la economía mexicana, el gobierno de la Ciudad de México decidió mantener el semáforo epidemiológico en color rojo sin permitir la apertura de sus negocios.
"En este sentido, lo invitamos al 'Cacerolazo: AbrimosOMorimos', con el objetivo de que las autoridades escuchen nuestra voz, toda vez que, el llamado de auxilio que hicimos a través de nuestra carta no fue atendido. Como lo hemos reiterado, el patrimonio e ingresos de miles de familias están en riesgo", dijeron los restauranteros en un comunicado.
El 7 de enero, 500 integrantes de la industria restaurantera del Valle de México, entre ellos Alsea (MX:ALSEA), una de las mayores cadenas de restaurantes en América Latina, advirtieron a través de una carta sobre la pérdida de aproximadamente 450 mil empleos en el país para finales de año en el sector por el cierre de negocios físicos ante la pandemia, por lo que pidieron a los gobiernos de la Ciudad de México y Estado de México ser considerados una industria esencial para poder reabrir sus unidades.
Como medida de apoyo Claudia Sheinbaum, jefa del gobierno capitalino, anunció la condonación de impuestos durante enero para los establecimientos de giro restaurantero y mixto que incluyan restaurantes, pero sin reanudar las actividades que suspendieron a mediados de diciembre por el cambio del semáforo a rojo, ante la escalada de contagios y hospitalizaciones por la pandemia.
"No es un tema solo de voluntad, es un tema de la situación que está viviendo la ciudad y las dificultades que está viviendo por la pandemia", dijo la jefa de gobierno en anterior conferencia en la que anunció la permanencia de la capital en semáforo rojo.
La Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) ya había advertido sobre la posible desobediencia de los restauranteros de permanecer cerrados ante la escasez de recursos para sobrevivir, luego que estos habían estado operando bajo aforo limitado, con medidas de seguridad y sanitarias para evitar la propagación del nuevo coronavirus, que ha ocasionado efectos graves en la salud de los mexicanos y también en la economía del país.
Hasta noviembre habían cerrado 13 mil 500 negocios del sector en la Ciudad de México y zona metropolitana, donde hay cerca de 25 millones de habitantes, de acuerdo con datos de Canirac.
La concentración de hoy será en la esquina de la Plaza Seminario, entre avenida Plaza de la Constitución y calle Moneda, dijeron miembros de la industria restaurantera.