(Actualiza con información de nueva fuga hidrocarburos)
CIUDAD DE MÉXICO, 21 ene (Reuters) - La fiscalía de México dijo el lunes que en los próximos días llamará a declarar a funcionarios encargados de atender la enorme explosión de un ducto de la petrolera estatal Pemex en el centro del país, que ha dejado 91 fallecidos.
El estallido se produjo el viernes mientras una multitud recolectaba gasolina que salía a chorros de una fuga en el ducto Tula-Tuxpan, a pocos kilómetros de una importante refinería en el central estado Hidalgo.
El gobernador del estado, Omar Fayad, informó el lunes que 91 personas han muerto por el incidente y que otras 52 están heridas, muchas de ellas de gravedad, por lo que no descarta que la cifra de muertos pueda superar el centenar de personas.
Fayad dijo a Reuters que la tarde del lunes se detectó otra fuga en un ducto cercano a donde ocurrió la tragedia, aunque a diferencia del anterior no se reportó que personas hubieran acudido con recipientes a tomar la gasolina.
El fin de semana surgieron críticas sobre el proceder de soldados y policías desplegados para proteger el ducto porque no pudieron contener a las cientos de personas que llenaban improvisadamente cubetas, botellas y todo tipo de recipientes, así como el tiempo en que se cortó el flujo del ducto desde que se detectó la fuga.
El Gobierno ha defendido reiteradamente su actuación, afirmando que se siguieron todos los protocolos de seguridad así como la cruzada emprendida desde fin del 2018 para tratar de combatir el robo de combustibles, que genera pérdidas por más de 2,500 millones de dólares al año a la petrolera estatal.
El fiscal general, Alejandro Gertz, dijo que se busca esclarecer si hubo negligencia relacionada con la tardanza para atender la emergencia. "Ese es un tema fundamental, la cronología de los hechos tiene que quedar absolutamente clara y precisa", afirmó en una conferencia de prensa.
Pese a que el robo de combustible ha crecido significativamente en varias zonas del país, dejando pérdidas millonarias a Pemex, las leyes para castigar estos hechos no son severas. El Congreso mexicano planea aprobar el próximo mes sanciones más severas contra quienes incurran en este delito.
López Obrador ha dicho que seguirá con el plan para doblarle el brazo a los ladrones de combustible, que asegura operaban desde el seno de Pemex. (Reporte de Adriana Barrera, Dave Graham y Lizbeth Díaz, escrito por Noé Torres Editado por Ana Isabel Martínez y Javier Leira)