23 abr (Sentido Común) - Odebrecht, el conglomerado brasileño de construcción, impugnará las sanciones económicas por más de mil 89.5 millones de pesos (57.7 millones de dólares) que la Secretaría de la Función Pública (SFP) impuso en días pasados a dos de sus subsidiarias y funcionarios por incumplir con algunos requisitos de los contratos que mantenía con Pemex Transformación Industrial, una subsidiaria de la empresa petrolera estatal Pemex.
Las sanciones, publicadas por la dependencia federal en el Diario Oficial de la Federación el miércoles, carecen de fundamentos y violan derechos fundamentales y el debido proceso, además que tergiversan los hechos respecto a los contratos a los que hace alusión, dijo la compañía en un comunicado.
"Odebrecht México rechaza categóricamente las consideraciones de la SFP, e impugnará mediante todos los recursos legales el contenido, alcances y efectos de dichas sanciones confiando que las autoridades judiciales competentes realizarán una revisión objetiva e imparcial de las mismas", agregó la empresa en el comunicado.
Las sanciones de la dependencia, que entre sus facultades está impedir y sancionar malas prácticas de funcionarios públicos o ejecutivos y empresas contratadas por entidades gubernamentales, fueron aplicadas a las filiales Odebrecht Ingeniería y Construcción Internacional de México y a Constructora Norberto Odebrecht.
También fueron sancionados Luis Alberto de Meneses Weyll y Gleiber José de Faria, directores general y de administración de finanzas de Odebrecht Ingeniería, respectivamente.
Las multas secundan las inhabilitaciones que la SFP ha aplicado a las filiales de Odebrecht en México, así como a sus ejecutivos, desde el año pasado y que van de los dos a los cuatro años.
La constructora brasileña cayó en desgracia en diversos países de América Latina como resultado de la operación "Lava Jato", una investigación que sacudió el sistema político de Brasil y otros países, como Perú, en donde la compañía habría utilizado un sofisticado método de pagos indebidos a políticos a cambio de proyectos.
En México, Odebrecht aceptó en 2016 haber hecho pagos irregulares por al menos 10.5 millones de dólares a un ejecutivo de alto rango de una empresa estatal mexicana -Emilio Lozoya, ex director de Pemex, uno de los señalados-, lo que desató el escrutinio de varios de los contratos que la compañía mantenía con la petrolera del Estado. (Redacción Sentido Común)