SANTIAGO, 9 abr (Reuters) - El presidente chileno Sebastián Piñera envió el lunes al Congreso un proyecto de ley para regular futuros flujos migratorios, mediante una ampliación de los tipos de visas, luego de que la población extranjera creciera más del doble en los últimos cuatro años.
En una ceremonia en el palacio presidencial, el recién asumido mandatario anunció la iniciativa que busca modernizar el sistema de Extranjería, bajo la idea de "fronteras abiertas" pero sin descuidar una migración segura y procesos más agiles de expulsión.
"Ha llegado el momento de poner orden en este hogar que compartimos, en esta casa que es la casa de todos", dijo Piñera en un acto de firma del proyecto.
De acuerdo al mandatario, se debe equilibrar el legítimo derecho del Estado a normar el ingreso y permanencia de extranjeros con el respeto a los derechos y deberes fundamentales de las personas.
Además afirmó que la norma debe atender "la mitigación de los riesgos asociados al movimiento de personas, combatiendo la inmigración irregular y reprimiendo las actividades delictuales en nuestras fronteras", como el tráfico de inmigrantes.
Chile, uno de los países más estables de América Latina y con el mejor grado inversión de la región, ha registrado una expansión de más del doble de su población extranjera desde el 2014, liderada por flujos migratorios procedentes de Haití, Venezuela y Colombia.
Según el gobierno conservador, las medidas -que incluyen propuestas contenidas en el proyecto del gobierno anterior-apuntan a mejorar la calidad de vida de los extranjeros, facilitando su inserción y desarrollo de capacidades.
De acuerdo a datos recopilados por el Gobierno, en Chile residen casi un millón de migrantes, que representan un 5,5 por ciento del total de la población. De esta cifra, cerca de un tercio se encuentra en situación irregular, destacó Piñera.
En el país, las mayores colonias de migrantes provienen de Perú, Colombia, Bolivia, Venezuela, Haití y Argentina. (Reporte de Antonio de la Jara, editado por Juana Casas)