Después de mucho hablar de una recesión inminente, nos encontramos una vez más ante un rugiente mercado alcista. La última etapa al alza de las acciones —que ha llevado a los índices de referencia a máximos históricos— está haciendo que algunas acciones muy maltratadas vuelvan a ganar atractivo y llevando a los inversores a comprar acciones cíclicas, que están estrechamente ligadas al rendimiento de la economía.
Pero a pesar de esta euforia, provocada por algunas mejoras en las negociaciones comerciales entre Estados Unidos y China, todavía no está claro cuánto durará este cambio y si podemos decir tranquilamente que han tocado fondo las acciones cíclicas, como las del sector industrial.
En una economía en la que la tasa de desempleo se mantiene en un nivel históricamente bajo y el banco central está listo para recortar los tipos de interés, todavía hay algunas señales de problemas en el horizonte.
El Departamento de Comercio de Estados Unidos, por ejemplo, anunciaba el viernes pasado que las ventas minoristas de octubre no lograron repuntar, tras la débil lectura de septiembre. Eso llevó a JPMorgan Chase & Co (NYSE:JPM). a rebajar sus previsiones del producto interior bruto para el cuarto trimestre del 1,75% al 1,25% en términos anuales.
En el frente comercial entre Estados Unidos y China, el flujo de noticias es ciertamente positivo y es posible que ambos países alcancen pronto la fase uno de un acuerdo comercial. Pero, en nuestra opinión, todavía es arriesgado crear demasiada expectación en torno a estas conversaciones. Ambos países siguen enviando señales contradictorias y hay muy poca información disponible para concluir que todo va bien.
Aunque los negociadores sostuvieron "discusiones constructivas" durante el fin de semana, la CNBC informaba el lunes de que China es pesimista acerca de llegar a un acuerdo debido a la renuencia del presidente estadounidense Donald Trump a revertir los aranceles existentes.
Primer signo de problemas
A pesar de estas preocupaciones, el actual repunte del mercado de valores indica que esta vez los inversores están casi seguros de que habrá un resultado positivo que impulsará el crecimiento y allanará el camino para que las empresas cumplan las expectativas de resultados de cara a 2020.
Cuando la guerra comercial se intensificó a principios de este año, los inversores dieron de lado a las empresas cíclicas. Pero esa tendencia está cambiando rápidamente y muchos de estos sectores superan al S&P 500 por ahora. El índice KBW Nasdaq Bank, por ejemplo, ha registrado una subida del 26% hasta la fecha, en comparación con la subida del 24% del S&P 500. El sector industrial del S&P 500 también está superando al mercado en general y ha subido ya un 28% en lo que va de año.
Si usted es escéptico acerca de esta visión unilateral del mercado, entonces es una estrategia prudente no emocionarse demasiado y comprar acciones que rápidamente revertirán su avance a la primera señal de problemas.
Las acciones de 3M Company (NYSE:NYSE:MMM), uno de los conglomerados industriales más grandes del mundo, son un ejemplo de las acciones que recomendamos evitar mientras que la recuperación siga en terreno inestable. Desde principios de octubre, las acciones han recuperado un 13%. Sin embargo, cayeron un 1,7% ayer, hasta cerrar en 167,77 dólares.
El fabricante de Minnesota de todo tipos de cosas, desde post-its, filtros de aire o pantallas táctiles, rebajó sus previsiones de ganancias e ingresos para 2019 el mes pasado, y el director ejecutivo, Michael Roman, habló de un entorno macroeconómico "complicado". Ese debilitamiento fue bastante generalizado, lo que sugiere que la demanda de sus productos industriales se está viendo lastrada por varios frentes.
Las acciones del potente fabricante de equipos de minería y construcción Caterpillar Inc (NYSE:NYSE:CAT) también protagonizó un fuerte repunte desde principios de octubre, subiendo más de un 20%. Las acciones se han desplomado estas últimas tres jornadas, cayendo un 1,2% ayer para cerrar la sesión en 141,52 dólares.
UBS (SIX:UBSG), en una nota reciente, rebajó la calificación de las acciones de Caterpillar, alegando que más de la mitad de los mercados finales de la compañía "alcanzarán su punto máximo" en 2019, "presionando los ingresos y los márgenes en 2020 a medida que disminuya la demanda".
Las débiles previsiones de Caterpillar, consideradas un barómetro económico, van en línea con las últimas previsiones económicas mundiales del FMI y la OCDE. Ambas instituciones han recortado sus proyecciones para las principales economías en 2019 ante las tensiones geopolíticas y comerciales.
En conclusión
La reciente demostración de fortaleza de los mercados estadounidenses se alimenta principalmente de las expectativas de los tipos de interés y las esperanzas de que se resuelva la disputa comercial con China. A pesar de estos acontecimientos positivos, no es un escenario "despejado" y siguen acechando muchos riesgos. En esta situación incierta, es mejor no comprar acciones que han demostrado ser demasiado arriesgadas y volátiles, como las de 3M y Caterpillar.