Mucho se está hablando esta semana de la fuerte presión vendedora a la que se han visto sometidos los títulos de Facebook (NASDAQ:FB). El escándalo desatado a raíz de las informaciones que hablan de robo de datos privados de los usuarios ha desatado mucho malestar entre los inversores de la compañía, que en muchos casos han decido apretar el botón rojo de las ventas
Sin embargo, pese a lo que pueda darnos a entender la suma de titulares, tal vez el escándalo que ha ocupado espacio destacado en las noticias de esta semana puede que no le haya salido tan caro a la compañía de Mark Zuckerberg como pueda parecer en un principio, y que al castigo del 10% impuesto por el mercado puedan ponérsele muchos matices.
En primer lugar, esta semana, la evolución de la rente variable estadounidense en su conjunto ha sido muy negativa, con caídas hasta el momento de escribir estas líneas superiores al 4% en el caso del Dow Jones y próximas al 4,5%, en el caso del S&P 500. Del mismo modo, en el tecnológico Nasdaq, la corrección acumulada se situaba en torno al 5%.
En el caso más concreto todavía del Nasdaq 100, la contracción alcanza el 5,75%, prácticamente la mitad del castigo total impuesto a Facebook. Si a esto, además, le sumamos también que el mercado se está cebando hoy viernes con los títulos de Western Digital (NASDAQ:WDC), con caídas superiores al 7%, Facebook no sería ni siquiera la acción peor parada de la semana. Con la pobre actuación también de Baidu (NASDAQ:BIDU), Facebook casi no entra ni en el pódium.
Si nos vamos ya al mucho menos selectivo S&P 500, hasta un total de 13 compañías encaran la última sesión de la sesión antes del fin de semana con caídas superiores al 10%.
Pero volviendo a poner la vista en el sector, en la selección a los valores incluidos por el Dow Jones de tecnológicas, no sólo los accionistas de Western Digital han tenido peor semana que Facebook para dejar de fumar, si no que hasta otras cinco compañías enfilan un final de semana peor que el de la compañía de Zuckerberg, incluidos dos gigantes del sector como Twitter (NYSE:TWTR) y Oracle (NYSE:ORCL).
En el caso de la red social, el desplome se produce ante la posibilidad de que el Gobierno de Israel tome medidas legales contra la compañía (algo de lo que apenas se ha oído hablar en los medios nacionales), mientras que la firma especializada en servicios en la nube sus discretos resultados pesan todavía sobre su cotización cuatro días después de decepcionar a los inversores.
A esta situación de entorno negativo, debemos sumar las noticias conocidas a mediados de semana de que la Comisión Europea ha propuesto crear un impuesto del 3% sobre la facturación de las grandes multinacionales del sector de la tecnología. Si bien esta medida tendría un carácter temporal, no ha gustado nada a los gigantes estadounidenses del sector, que se sienten objetivo de una posible represalia europea a esa guerra comercial tan fácil de ganar que propone Donald Trump.
Si comparamos la evolución de Facebook esta semana con la del resto de las denominadas FAANG (Facebook, Amazon (NASDAQ:AMZN), Apple (NASDAQ:AAPL), Netflix (NASDAQ:NFLX) y Google), vemos que el castigo “extra” aplicado al mercado no es tan alarmante como pueda resultar un número de dos dígitos en un titular.
Ni siguiera Amazon y Netflix, que reman un poco más por libre, se han escapado de la quema y acumulan descensos cercanos al 3%; mientras que Google y Apple, más afectadas por las amenazas europeas y más expuestas a todo lo que tenga que ver con el manejo de información de los usuarios, registran caídas que llegan casi al 7% en el caso de Alphabet (NASDAQ:GOOGL). Es más, si miramos la evolución a partir del miércoles, los movimientos entre todas ellas están casi coreografiados.
Si además añadimos a la ecuación a las mencionadas Twitter y Oracle, vemos como el castigo del mercado a un escándalo que afecta directamente a la fuente de ingresos de Facebook (sus usuarios y todo lo que la empresa sabe de ellos), el castigo podría resultar incluso muy discreto.
En cualquier caso, una caída semanal del 10%, tampoco es algo que podrías llamar un “castigo extraordinario”. Si bien es cierto que no se ve todos los días en compañías que cotizan casi en los 200 dólares por acción, sí que es algo muy común y que sufren muchas sociedades todas las semanas en todos los mercados.
Esta misma semana, en el mercado español, sin hacer un gran ruido mediático y sin atraer siquiera una gran atención de la mayoría de los inversores, Sniace (MC:SNCE) apunta a un desplome del 20%, y todo ello sin aparecer en los titulares junto al nombre de Trump y sin que su presidente se ofrezca a comparecer en el Congreso de los Diputados.
Del mismo modo, Codere (MC:CDRE) y GAM (MC:GALQ) acumulan también un retroceso cercano o incluso superior al 10%, mientras un jugador de los más populares del mercado como OHL (MC:OHL) se ha movido en torno a esas cifras en los últimos días.
Si a la caída generalizada de la renta variable, le sumamos los problemas propios del sector, podríamos decir que a la cotización de Facebook le está saliendo muy barato el gran escándalo de esta semana, ya que buena parte de esa corrección del 10% seguramente habría llegado igual a los títulos de la compañía por las actuales condiciones del mercado.
Dicho de otro, ¿Podríamos decir que la corrección de Facebook sería similar a la de otras tecnológicas como Google o Apple si no llegase a destapar todo el escándalo esta semana? Es más, ¿ha tenido suerte Facebook de que el escándalo se haya producido esta misma semana de fuertes correcciones en el sector, de modo que las malas noticias sobre la compañía se han visto amortiguadas por las malas noticias para el sector y la renta variable en general?
También es lícito preguntarse que qué pasaría si las noticias hubieran llegado en una semana más favorable para el sector, tal vez la corrección en relación a sus pares hubiera sido mucho mayor en ese caso, por no hablar del supuesto en el que el escándalo se destapase en una semana de frenesí comprador como las que nos tenía acostumbrados Wall Street hasta hace poco. ¿Qué pasaría si las informaciones se publicasen en plena orgía compradora en el mercado y Facebook no pudiera sumarse a la fiesta?
Las respuestas a todas estas preguntas son pura teoría y especulación ya que nunca podremos saberlo con certeza. Sin embargo, sí que podemos plantearnos ahora si el castigo a Facebook está siendo demasiado liviano. Esta es la respuesta que me da Joaquín Gual, CEO de Másquetrading:
La cotización de Facebook ha caído muy poco y se notaron mucho las compras del miércoles, que seguramente fueran de acciones propias para evitar males mayores. Google, sin estar metido en el ajo, ha perdido mucho también, o sea que poca factura le está pasando a Facebook la situación.