Este año ha sido uno de los más explosivos en el mercado, con activos que superaron todas las expectativas. Si te preguntaste quiénes lideran el año, acá te traigo la respuesta.
Un asset class o clase de activo es una categoría de inversión que agrupa productos financieros con características similares. Esta es la clasificación del ranking:
- Bitcoin ($BTC): +43%
Bitcoin está liderando el año y ese patrón se repitió en 11 de los últimos 14 años. Este año en particular, la creciente adopción institucional y la entrada de grandes fondos de inversión al mercado cripto han ayudado a impulsar su precio, a pesar de su alta volatilidad.
- Oro (GLD): +27%
El oro, a través del ETF GLD, sigue demostrando sus grandes fundamentos: activo refugio, buena performance ante caída de tasas, demanda récord de bancos centrales, baja correlación con el resto de los activos tradicionales.
- US Growth (IWF): +25%
Los ETFs de “Growth” o crecimiento, como el IWF, invierten en compañías con altas expectativas de crecimiento futuro. En un año dominado por el sector tecnológico y, especialmente, por las empresas de semiconductores, el IWF ha logrado un retorno impresionante del 25%. Estas compañías suelen reinvertir sus ganancias en lugar de pagar dividendos, con la esperanza de expandir su valor de mercado a largo plazo.
- US Acciones Grandes (SPY): +22%
El SPY, que replica el S&P 500, es el ETF más popular del mundo y está compuesto por las 500 empresas más grandes de Estados Unidos por capitalización bursátil. Estas empresas abarcan una amplia variedad de sectores, desde tecnología hasta salud y consumo. Actualmente está en máximos históricos.
- US Nasdaq 100 (QQQ): +20%
El QQQ sigue siendo el referente para quienes quieren apostar por las grandes tecnológicas. Con un retorno del 20% en 2024, este ETF, que sigue al índice Nasdaq 100, fue impulsado por el auge en sectores como inteligencia artificial, software y, obviamente, los semiconductores.
- US Value (IWD): +15%
El ETF IWD invierte en acciones de “Value” o valor, es decir, en empresas que, según sus fundamentos, están subvaluadas respecto a su precio en el mercado. Con un retorno del 15%, este ETF tuvo un buen año, beneficiándose del regreso de flujos de capital a sectores más tradicionales como las finanzas y las industrias que quedaron rezagadas tras el rally tecnológico.
- US REITs (VNQ): +12%
Finalmente, el ETF VNQ, que invierte en Real Estate Investment Trusts (REITs), es decir, en fondos de inversión inmobiliaria, ha dado un retorno del 12% en 2024. Este tipo de activos suele ser atractivo para inversores que buscan ingresos regulares a través de dividendos, y este año no fue la excepción, ya que se beneficiaron de eso y, principalmente, de la caída en la tasa de interés.
Si bien las acciones tecnológicas y las criptomonedas dominaron el panorama, los activos tradicionales como el oro y el sector inmobiliario también demostraron su resiliencia.
Además, este ranking muestra únicamente el retorno acumulado. Lo verdaderamente importante en una cartera de inversión es el retorno ajustado por riesgo. En ese contexto, sin dudas, la estrella del año es el oro, teniendo en cuenta que tiene un tercio de la volatilidad del Bitcoin.
¿Hay algo más alcista que el oro hoy en día? Es difícil de encontrar.
Veamos su gráfico en semanal:
El oro sigue siendo una inversión atractiva por varios factores fundamentales. Su precio está estrechamente relacionado con la tasa de interés real, que ajusta la tasa nominal por la inflación. Cuando las tasas reales caen, el oro tiende a subir porque los inversores buscan alternativas a los bonos del Tesoro que ofrecen menor rendimiento. Actualmente, la tasa a 10 años ha disminuido considerablemente, lo que ha impulsado al oro a un nuevo máximo histórico.
Además, el aumento continuo de la deuda del Tesoro de EEUU y la falta de soluciones claras para el déficit pueden presionar aún más al alza el valor del oro.
Otro factor relevante es la acumulación de oro por parte de los bancos centrales a niveles récord, lo que refuerza su atractivo como activo seguro. Como si fuera poco, el oro históricamente actúa como refugio en tiempos de incertidumbre global, incluyendo conflictos bélicos.
Como siempre, es importante diversificar. Pero, sin dudas, cualquier cartera de inversión debería tener (hace mucho tiempo) cierta porción en oro.