El oro terminó la jornada mostrando un retroceso de 0.66% cotizando en 1,333.78 dólares por onza, derivado de una disminución en la volatilidad y aversión al riesgo en los mercados financieros globales. El lenguaje altamente acomodaticio por parte del Banco de Inglaterra durante su anuncio de política monetaria, a pesar de dejar sin cambios su tasa de referencia en 0.50%, permitió un sentimiento de positivo entre los participantes del mercado. Ante esto, los índices accionarios terminaron la sesión con ganancias.
En Europa, el mercado de capitales finalizó en terreno positivo. El Euro Stoxx avanzó 1.26%, el DAX de Alemania subió 1.39%, el CAC 40 de Francia avanzó 1.16%, por su parte el IBEX 35 de España ganó 0.93%, mientras que el FTSE MIB de Milán avanzó 1.63%. Es importante mencionar que el Dow Jones, S&P 500 y la IPC terminaron con nuevos máximos históricos.
Sin embargo, las presiones al alza para el precio del oro continúan latentes y es altamente probable que el metal vulva a cotizar en los 1,359 dólares por onza, e inclusive pueda superar el máximo anual de 1,375.45, ante cualquier indicio de debilitamiento económico o volatilidad y aversión al riesgo.
Por su parte, el cobre cerró la sesión mostrando un incremento marginal de 0.08% y cotizando en 4,922 dólares por tonelada. El tono positivo que se encuentra impulsando las ganancias en los mercados financieros globales continúa incrementando el precio de los metales industriales. Asimismo, las expectativas de mayores estímulos fiscales y monetarios en algunas economías avanzadas han impulsado las ganancias.
Es importante mencionar que durante la sesión del miércoles, Estados Unidos acusó a China de no eliminar los derechos de exportación de ciertas materias primas, así como se acordó en el momento en el que entró en la Organización Mundial del Comercio hace 15 años. Ante esto, es probable que los precios del cobre puedan mostrar una tendencia al alza.
El maíz terminó la sesión mostrando una pequeña corrección al cerrar con un retroceso de 0.96%, cotizando en 3.62 dólares por bushel, luego de haber mostrado un incremento mayor al 4% durante la sesión anterior. Sin embargo, es importante mencionar que las presiones a la baja para el activo continúan latentes, debido a que se espera una mayor cosecha del grano. De acuerdo con la última proyección del Departamento de Agricultura de Estados Unidos, se espera una cosecha de 167.10 bushel por acre.
Por su parte, el trigo cerró con pérdidas cotizando en 4.21 dólares por bushel, lo equivalente a un retroceso de 1.06%. Se espera que las presiones a la baja parta el grano continúen observándose debido a el excelente crecimiento del trigo ruso, uno de los principales exportadores de trigo del mundo.