Por Laura Sánchez
Investing.com - Es la cita del día. Tras el golpe a los mercados de un BCE más hawkish, hoy las bolsas europeas y asiáticas esperan en rojo el dato de IPC en Estados Unidos correspondiente al mes de mayo. Se espera un ascenso del 8.3%, al igual que el mes anterior.
Tras las caídas de ayer de S&P 500 y Nasdaq por encima del 2%, las principales bolsas europeas -Dax, Cac...- siguen la misma estela este viernes con descensos superiores al 1%. Y, en el caso del Ibex 35, las pérdidas superan el 2%.
Por su parte, Bankinter (BME:BKT) no descarta "que pueda incluso repuntar ligeramente, apoyado en fuertes subidas salariales y con el precio del petróleo alcanzando nuevas cotas (WTI c.+15% en mayo vs abril). No podemos olvidar tampoco que en términos intermensuales el incremento previsto es del +0.7% en mayo vs +0.3% anterior".
"Cabe destacar que en este mercado los inversores llevan días muy pendientes de este dato y que muchos de ellos consideran que puede ser determinante para la Reserva Federal (Fed) a la hora de diseñar los próximos movimientos de sus tipos de interés de referencia", explican en Link Securities.
"El convencimiento general es que los bancos centrales, con el estadounidense a la cabeza, están totalmente comprometidos en bajar la inflación, incluso a costa de penalizar el crecimiento económico, lo que podría llevar a algunas de las economías desarrolladas a entrar en recesión. De ahí la relevancia del comportamiento de la inflación estadounidense en el mes de mayo", añaden estos analistas.
La clave, según Renta 4 (BME:RTA4), es "confirmar o no que ya habríamos alcanzado el techo de inflación en el caso americano, tanto a nivel general (8.2%/8.3%e vs 8.3% en abril y máximo 8,5% en marzo) como subyacente (5.9%e vs 6.2% en abril y máximo 6.5% en marzo)".
Para Link Securities, "si se demuestra, como esperan los analistas, que la inflación general y su subyacente han bajado con relación a abril, lo que supondría que estas variables han alcanzado el pico del ciclo, los inversores reaccionarán de forma muy positiva, ya que ello permitirá a la Fed seguir con su actual “hoja de ruta” -el consenso de analistas espera que la inflación subyacente baje hasta el 5.9% desde el 6.2% del mes precedente-. Por el contrario, si la inflación se situó en mayo por encima de lo esperado y del nivel de abril, creemos que ello provocará fuertes caídas en los mercados estadounidenses tanto de los bonos como de la renta variable, caídas que arrastrarán sin ninguna duda a los mercados europeos ya que, de cumplirse esta hipótesis, los inversores comenzarán a descontar una mayor agresividad de la Fed a la hora de retirar sus estímulos monetarios".