♦ Persiste el sentimiento de aversión al riesgo. Entre otros factores, lo que ha captado la atención de los últimos días ha sido el fuerte empinamiento de la curva de Treasuries tras el recorte de Fitch y anuncios de mayor oferta de deuda del Tesoro. Se observaron pérdidas de 8pb en promedio concentradas en la parte larga y el diferencial 5/30 se tornó positivo por primera vez desde mediados de junio. La toma de utilidades en carry trades continúa, con el MXN (-1.7%) como la tercera más débil en EM detras de COP (-2.4%) y BRL (-1.9%), rompiendo el PM de 50 días. El siguiente soporte es el PM de 100 días en 17.58 por dólar.
♦ En el frente monetario, el BoE moderó el ciclo alcista con un alza de 25pb en su tasa de referencia a 5.25%. Esto alimentó la expectativa de que el ciclo restrictivo en desarrollados terminará pronto. No obstante, las tasas se mantendrán elevadas el resto de 2023. Barkin (Fed de Richmond) dijo que los últimos datos de inflación podrían indicar un 'aterrizaje suave' lo que significaría un regreso a la estabilidad de precios sin una recesión. Además, los servicios –principal motor económico– se desaceleraron en el ISM de julio de EE. UU. (52.7pts vs 53.9 previo) con un ligero retroceso en nuevas órdenes y empleo. Después del cierre, Amazon (NASDAQ:AMZN) dio una guía positiva y Apple (NASDAQ:AAPL) reportó en línea con lo esperado.
♦ Arabia Saudita extendió el recorte voluntario de producción de 1 Mbbl/d a septiembre e inclusive podría extenderse más o ampliarse, impulsando a los precios del petróleo. Asimismo, Rusia reducirá las exportaciones en septiembre en 300 mil bbl/d. Con ello, ambos países buscan mantener la estabilidad en el mercado energético en un entorno con señales de debilidad en China –principal importador de crudo–, pero menor preocupación por una recesión en EE. UU. y expectativas de una mayor demanda global. El Brent superó 85 US$/bbl y vemos factible que se mantenga cerca de 90 US$/bbl.