Los mercados financieros chinos experimentaron un retroceso el miércoles, mientras los inversores lidiaban con las implicaciones de la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales estadounidenses frente a la demócrata Kamala Harris. La perspectiva de un segundo mandato de Trump, junto con el control republicano del Congreso de EE.UU., ha suscitado preocupación por el aumento de las tensiones entre EE.UU. y China, especialmente en las áreas de comercio y tecnología.
El índice CSI300, que sigue a las mayores empresas cotizadas en las bolsas de Shanghái y Shenzhen, cerró con una pérdida del 0,5%. El índice Hang Seng de Hong Kong, considerado a menudo un indicador del sentimiento de los inversores internacionales, cayó un 2,3%. Del mismo modo, el índice Hang Seng China Enterprises, que representa a las empresas chinas que cotizan en Hong Kong, cayó un 2,6%.
Los valores tecnológicos de Hong Kong se vieron notablemente afectados, y los gigantes del comercio electrónico JD.com (NASDAQ:JD) y Alibaba (NYSE:NYSE:BABA) vieron descender sus cotizaciones un 4%. Los resultados electorales han puesto en el punto de mira las políticas comerciales de Trump, que anteriormente habían incluido importantes aranceles sobre los productos chinos. En su campaña, Trump había propuesto aranceles del 60% o más sobre los productos procedentes de China, una medida que podría tener graves repercusiones para la economía china y el comercio mundial.
Rong Ren Goh, de Eastspring Investments, destacó el enfoque del mercado en el potencial de los aranceles, dada la capacidad del presidente para imponerlos a través de órdenes ejecutivas. Goh también mencionó la posibilidad de otras medidas, como sanciones financieras y restricciones al acceso a tecnología crítica, que podrían afectar al desarrollo de China en inteligencia artificial y otros sectores.
Es probable que los inversores adopten ahora una postura defensiva respecto a los activos relacionados con China y que traten de cubrir su riesgo cambiario. El yuan extraterritorial se debilitó significativamente frente al dólar, cayendo más de un 1% hasta su punto más bajo desde mediados de agosto. El yuan terrestre también registró un descenso superior al 0,8%. Los principales bancos estatales chinos vendieron dólares para frenar la depreciación del yuan.
A pesar de las reacciones del mercado, los inversores onshore siguen atentos a la reunión de la Asamblea Popular Nacional (APN), que se celebra del 4 al 8 de noviembre. Se esperan más medidas de estímulo, que podrían tener un mayor impacto en los mercados que los resultados de las elecciones estadounidenses.
Aunque tanto el partido demócrata como el republicano han mostrado una postura dura respecto a China, la imprevisibilidad de Trump en la formulación de políticas podría añadir incertidumbre al mercado. Kenny Ng, de China Everbright Securities International, señaló que el enfoque menos predecible de Trump podría desalentar aún más el sentimiento del mercado.
El mercado de renta variable chino se ha recuperado, y el índice CSI 300 ha subido más de un 20% desde el 23 de septiembre, tras los recortes de tipos y las medidas de estímulo. Sin embargo, el resultado de las elecciones estadounidenses podría frenar este repunte, especialmente en sectores como la tecnología, la defensa y las exportaciones, sensibles a la política estadounidense.
Los resultados de las elecciones estadounidenses seguirán siendo un punto de atención para los mercados mundiales, ya que se espera que se desarrollen políticas que afecten a las relaciones internacionales y al comercio.
Reuters ha contribuido a este artículo.
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