El jueves, Wall Street sufrió un importante retroceso, con una caída del 1,81% en el índice S&P 500 y del 2,80% en el Nasdaq Composite. El índice industrial Dow Jones también cayó un 1,62%. Este descenso se produjo tras un comienzo de jornada positivo, impulsado por los sólidos resultados trimestrales de Meta Platforms Inc (NASDAQ:META) y sus optimistas previsiones para el próximo trimestre, que inicialmente hicieron subir sus acciones un 4,37%, hasta 495,55 dólares.
Sin embargo, el ambiente en el parqué cambió cuando nuevos datos indicaron posibles vientos económicos en contra. El índice de actividad manufacturera del Instituto de Gestión de Suministros (ISM) cayó en julio a su nivel más bajo en ocho meses (46,8), una cifra que indica contracción en el sector.
Los estrategas y analistas del mercado opinaron sobre la volatilidad del día. Bill Strazzullo, estratega jefe de mercado de Bell Curve Trading en Boston, sugirió que el mercado podría experimentar una consolidación y fluctuar lateralmente durante uno o dos meses. A pesar de la venta del día, mantuvo una perspectiva positiva a largo plazo, prediciendo que el S&P 500 podría alcanzar entre 5.900 y 6.000 puntos, el Nasdaq 100 alrededor de 22.000, y el Dow Jones entre 45.000 y 46.000 puntos.
Spencer Hakimian, Consejero Delegado de Tolou Capital Management en Nueva York, atribuyó la venta masiva al desapalancamiento cruzado de activos y expresó su convencimiento de que los temores al crecimiento eran incoherentes con las actuales políticas fiscales, el crecimiento real de los salarios y las sólidas previsiones de gasto de capital de las empresas tecnológicas.
Quincy Krosby, estratega jefe mundial de LPL Financial en Charlotte, Carolina del Norte, envió una nota por correo electrónico en la que destacaba la preocupación de que la economía pueda estar enfriándose demasiado rápido. La caída de la rentabilidad del Tesoro a diez años por debajo del 4% se consideró una señal de un susto en el crecimiento económico y planteó dudas sobre el momento en que la Reserva Federal ajusta su política monetaria. Krosby también mencionó la anticipación del mercado a un posible recorte inicial de los tipos en la reunión de la Fed del 18 de septiembre y el deseo de que la Fed actúe como salvaguarda frente a una recesión económica más grave.
La atención del mercado se centra ahora en el informe de nóminas no agrícolas de mañana, que podría influir en las decisiones políticas de la Reserva Federal si la tasa de desempleo aumenta a pesar del incremento de la tasa de participación.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.